Alertan sobre la venta de aceite adulterado en La Habana

La fotógrafa y productora cubana Karelis Herrera Pérez alertó sobre la venta de aceite de soya adulterado en La Habana, específicamente en la feria que se encuentra debajo del Puente de 100, en el municipio Boyeros.

“Amigos tengan mucho cuidado hoy nos ESTAFARON”, denunció la mujer en su muro en Facebook. Según contó, compró el galón por un valor de 1200 CUP; “el litro salió a 300 pesos”.

Para su sorpresa, cuando necesitó usar el producto, descubrió que no era original. “Ya son expertos, sellan el pomo y todo como si fuera de la tienda”, afirmó. Dentro había “agua pintada con una sustancia que puede ser grasa de pelo, o sabe Dios qué invento”.

Aunque Karelis Herrera Pérez no detalló si colocó el líquido al fuego, pidió a sus seguidores en la mencionada red social “tener mucho cuidado al comprar a revendedores”.

¿De dónde salió ese producto? Las teorías comienzan a ganar fuerza y prevalece la más inesperada. “Están vendiendo el aceite con el que incineran a los muertos. También están vendiendo las tanquetas de pinturas selladas y es falsa”, comentó en el post un internauta.

Al parecer, los estafadores van hasta las viviendas para vender el líquido. “A mí me pasó en la puerta de mi casa, pero yo sí lo comprobé. Ellos muy amable accedieron, metiendo un palito para que verificase era aceite. Sí, era aceite lo de arriba, porque abajo a saber qué rayos era. Les caímos atrás, pero andaban en motos”, agregó otra persona.

Muchos lamentaron la falta de sensibilidad que se vive en la Isla, donde además de altos precios, los artículos con mala calidad son vendidos en la calle sin tener en cuenta los graves daños que pueden causar a los consumidores.

“Que horror. No se dan cuenta de que hay niños que pueden enfermar”, señalaron. “Hay que tener cuidado. La gente por hacer dinero no le importa. No hay escrúpulos”. Mientras esto ocurre y la necesidad obliga al recurrir al mercado informal, las autoridades hacen bien poco por ponerle freno.

“No es fácil así. Andan muchas personas acabando y no hacen nada porque son estafadores de aceite, estafadores de Keratina y de muchas cosas más. Dios permita que los puedan coger y tengan su merecido porque no saben cuántos esfuerzos hacemos para comprar algo”, señalaron.