¿Una patrulla de la PNR envuelta en negocios ilícitos?

Patrulla cubana utilizada para negocios ilícitos (Collage: San Nicolás de Bari – Facebook)

Una de las quejas más frecuentes de la población cubana es que las patrullas de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) son utilizadas para muchas cosas menos para combatir la delincuencia y auxiliar a la población.

Ejemplo de ello fue captado en calles de La Habana cuando la patrulla con el número 698 estaba siendo utilizada para negocios ilícitos, denunció la página de Facebook San Nicolás de Bari.

Las imágenes compartidas muestran a elementos de la PNR y una persona vestida de blanco bajar cosas de la unidad para luego meterlas a una casa.

Usuarios en redes sociales coincidieron en que los involucrados se estaban apropiando de productos decomisados en algún operativo que por lo general se aplica contra cuentapropistas.

La usuaria Mary Gómez comentó que prácticamente son ladrones con uniforme y recordó que una ocasión policías pararon un transporte público para decomisar queso, leche y carne a los vendedores conocidos como merolicos.

“Pasa todos los días, en todos los lugares de Cuba, ellos reprimen al pueblo y son más gusanos y se la pasan haciendo cosas ilícitas”, reclamó la internauta Tania Casola López.

El usuario Carlos Castro Pérez dijo que seguramente los policías involucrados van a recibir una medalla y quien captó las imágenes una tunda, además de una multa de 6.000 pesos.

“Eso es normal en Cuba, los policías son más delincuentes que los que están en prisión”, agregó la ciudadana Yasmany Morales.

Hace unos días se denunció que agentes en una patrulla de la PNR se negaron a trasladar a una embarazada a punto de parir al hospital Ramón González Coro, ubicado en la capital cubana, alegando que la unidad no podía ser utilizada como taxi.

“Es lamentable está situación que tenemos con las restricciones a causa de la pandemia, pero no creo que sea el punto de que estos señores no puedan cumplir con una simple emergencia, porque según ellos existe un protocolo que no se puede romper”, manifestó el padre de la mujer al exhibir el carro 103E.

La ciudadanía también ha acusado que los policías no saben conducir sus propias patrullas y por ello terminan en accidentes como el ocurrido en junio pasado cuando dos unidades chocaron en La Habana “por estar haciendo carreras”.

En redes sociales se denunció que el impacto, registrado en la esquina de San Anastasio y Dolores, en Lawton, también causó daños a una farmacia.