Productores demuestran su punto, Ciego de Ávila está mejor sin Acopio

Ciego de Ávila ofrece más variedad de alimentos con nueva modalidad de ventas sin Acopio. (Foto ilustrativa: Alden Hernández Díaz-Invasor)

La provincia de Ciego de Ávila es uno de los territorios que ha comenzado a implementar la comercialización de productos agrícolas sin la participación de la empresa estatal Acopio.

Esta nueva modalidad consiste en que los productores y vendedores realicen sus propias contrataciones y transporten por su cuenta sus productos de manera directa a sus clientes.

Con ello, se deshacen de las cadenas de intermediarios en Ciego de Ávila que en ocasiones anteriores producían más problemas y contratiempos que las ventajas ofrecidas. Los costos ven un ligero descenso, pues ya no pagan el precio del transporte por parte del Estado.

Según el medio oficialista Invasor, esta nueva modalidad se está realizando en el mercado El Platanito y el Punto de Venta La Piña, en el centro del poblado de Gaspar.

Ariel Nieves Concepción, director de la Unidad Empresarial de Base de Acopio Baraguá, reconoció que con esta nueva modalidad hay más rapidez en el pago a los productores, algo que ha sido un problema serio para los campesinos de la Isla desde hace años.

A su vez, el funcionario aceptó que habrá más variedad y calidad en los productos que se ofertan a los ciudadanos.

El directivo reconoció que este nuevo método representa mayores ganancias para todos. Esta ventaja queda clara cuando se considera que durante los primeros tres meses del año el mercado incumplía con su plan de ventas, mientras que los primeros 10 días de abril han sobrepasado lo previsto.

Estos números representan una clara mejora por sobre el método anterior, el cual dependía de la empresa estatal de Acopio para el transporte y la venta de los productos.

Esta dependencia representó desventajas en varias ocasiones, pues campesino llegaron a denunciar que sus productos se estaban pudriendo en los campos debido a que Acopio se negaba a recogerlos por una supuesta escasez de combustible.

En esas ocasiones, los campesinos no podían hacer nada al respecto, pues si intentaban mover su producto por cuenta propia se arriesgaban a ser multados y perder el resto de su producción ante las autoridades castristas.