Con multa, sale libre el pastor que predicaba el evangelio en Camagüey

Tras haber sido detenido mientras predicaba el evangelio en Camagüey, el pastor Juan Bautista Cárdenas recibió una multa de 588 pesos por el delito de “desacato a las autoridades”.

“Solamente estaba predicando y unos policías me amenazaron con caerme a patadas y yo los reprendí en el nombre del Señor. Me acusaron de hablar mal del gobierno y de desacato. Esto es una gran injusticia”, comentó el religioso al ser entrevistado.

Bautista Cárdenas, quien desde hace 25 años es evangélico, aseguró que se siente pisoteado, intimidado por parte de las autoridades y muy agraviado por el acto represivo del que fue víctima.

El pastor también comentó que lo único que hacía al momento de ser reprendido por policías era hablarle a la gente de la importancia de acercarse a Dios y sobre el fin de los tiempos.

Luego de su liberación, Bautista Cárdenas llegó a un hospital con ayuda de su hermano porque se le estaba subiendo la presión.

El portal Evangélico Digital denunció que el pastor estaba predicando a las afueras del edificio del Gobierno del municipio de Esmeralda cuando los policías lo arrestaron por “despreciar y falta el respeto a la autoridad”, porque según ellos los llamó “perros”.

Realmente, el pastor estaba leyendo un pasaje del apocalipsis, el cual dice “pero afuera se quedarán los perros, los que practican las artes mágicas, los que cometen inmoralidades sexuales, los asesinos, los idólatras y todos los que aman y practican la mentira”.

Ya detenido, el pastor decidió permanecer en ayuno y oración, pero este acto fue confundido con una huelga de hambre por lo que se decidió llevarlo a juicio donde hoy le otorgaron la libertad y dicha multa.

Además de Bautista Cárdenas, este año han sido reprimidos varios religiosos con multas, intimidaciones y hasta regulaciones para evitar que salgan del país.

Un caso muy conocido y difundido en medios independientes es el del matrimonio de Ramón Rigal y Ayda Expósito, pastores evangélicos que fueron condenados a prisión por intentar educar a sus hijos en casa en vez de que reciban el adoctrinamiento comunista.

La pareja fue acusada por el delito de “otros actos contrarios al normal desarrollo del menor”.

A finales del mes pasado, el pastor apostólico Alaín Toledano recibió una notificación donde se le indicaba que fue acusado de “desobediencia” y podría enfrentar de tres meses a un año de cárcel por organizar sin permiso un evento acerca del rol de la mujer.