Copa Airlines volverá a levantar vuelo pese al cierre de fronteras en Panamá

El Gobierno de Panamá extendió por quinta ocasión consecutiva el cierre de fronteras y la prohibición de vuelos comerciales, al menos hasta el venidero 21 de septiembre, producto del aumento de casos de coronavirus.

La medida, aprobada el pasado 19 de agosto y publicada en la Gaceta Oficial del país centroamericano, establece ciertas excepciones además de los ya conocidos vuelos humanitarios y aquellos de carga que transportan equipos o insumos médicos.

En esta ocasión también quedan fuera de la prohibición aérea, todos aquellos vuelos internacionales que formen parte del denominado “corredor turístico”, que tendrá como base al Aeropuerto Internacional de Tocumen y serán operados por la aerolínea por excelencia de Panamá, Copa Airlines.

Bajo esta normativa, los viajeros que deseen tomar uno de estos vuelos tendrán que someterse a una prueba PCR, con 48 horas de antelación. A la par, tendrán que firmar una declaratoria jurada donde se comprometen a cumplir las orientaciones del Ministerio de Salud y los controles que estos le establezcan.

En caso de ser nacionales panameños, deberán realizar una cuarentena de 14 días tras su llegada. Pero los extranjeros, solo tienen permitido hacer escala en el aeropuerto.

Al momento del cierre de las operaciones aéreas, Copa tenía frecuencias semanales sin escala para distintos destinos como: Miami, Nueva York, Ciudad de México, Washington DC, San José de Costa Rica, Santo Domingo, Quito, Guayaquil, San Pablo y Santiago de Chile.

Contexto del coronavirus en Panamá

Actualmente, Panamá registra 87.485 casos confirmados y cerca de 1.906 fallecidos. Por otra parte, otros 62.185 pacientes ya han recibido el alta médica.

A pesar de no ser uno de los países más azotados por la pandemia, el Gobierno de Laurentino Cortizo ha tomado estrictas medidas. El cierre de fronteras, por ejemplo, se ha ido extendiendo mes tras mes, siempre con la advertencia de una nueva y muy posible prórroga. Sin embargo, las normativas higiénicos-sanitarias no han sido suficiente para frenar la ola de contagios.