MUNDO
Pésimas condiciones en centros de aislamiento en Venezuela vigilados por médicos cubanos
Pacientes califican estos centros como un “infierno”, debido a las malas condiciones de higiene y hacinamiento en las que se encuentran
Denuncian malas condiciones en los centros de aislamiento en Venezuela vigilados por médicos cubanos. (Foto de referencia: Hector Luis González-Twitter).
Las pésimas condiciones de los centros de aislamiento en Venezuela han sido denunciadas por los venezolanos que son obligados a permanecer en ellos por orden de Nicolás Maduro.
Al igual que ocurrió en Cuba desde el inicio de la pandemia, quienes dan positivo al COVID-19 son obligados a permanecer en esas instituciones, controladas por médicos de cubanos.
Según un reporte de Bloomberg, los pacientes enviados a dichos centros los califican como un “infierno”, debido a las malas condiciones de higiene y hacinamiento en las que se encuentran.
La célebre publicación relata el caso de Juan, un taxista de 53 años residente de Caracas, que dio positivo a coronavirus y que fue obligado por funcionarios del régimen a ir a uno de estos refugios.
El hombre afirma que pasó tres días durmiendo en una silla porque no había espacio para acostarse.
“Nos dieron de comer arroz frío, lentejas y arepas. El lugar estaba controlado por milicias armadas y médicos cubanos”, explicó.
Tras su estancia en ese sitio, el taxista fue llevado a un estadio de la ciudad que funciona como centro de aislamiento, donde permaneció dos semanas.
Las malas condiciones y carencias que enfrenta el sistema de salud venezolano llevaron al gobierno a actuar como China y Cuba, colocando centros de aislamiento ajenos a los hospitales, aunque sin condiciones dignas para sus pacientes.
Los terribles relatos de los sobrevivientes han provocado que miles de venezolanos prefieran no someterse a las pruebas públicas y se mantengan alejados de los centros administrados por los médicos cubanos.
Los propios médicos privados también recomiendan alejarse de estos sitios, que por su naturaleza sirven como un potencial foco de infección, lo que ha generado persecución y arrestos.
La directora de la Sociedad Venezolana de Infectología, María Graciela López, afirmó que “quizás” el sistema de aislamiento obligatorio funcionó en China “porque el sistema de salud pública funciona”, pero recalcó que en Venezuela existen muchos problemas.
“Venezuela ya tenía escasez de personal de salud. La gente tiene miedo. Ahora, los pacientes que están llegando a los centros de salud necesitan son cupos de terapia intensiva, porque estuvieron aguantando en casa hasta que no pudieron más”, explicó.
El citado medio también presentó el caso de un ingeniero eléctrico de 39 años identificado como Luis, que informó que tras dar positivo al coronavirus pasó semanas en cuarentena forzada con más de 30 personas en San Cristobal, Venezuela.
El ingeniero viajó desde Perú hasta el país petrolero caminando, travesía que le costó 45 días de viaje.
“Dormimos sobre colchonetas viejas y muy gastadas, es casi como dormir en el piso”, denunció a través de llamadas y mensajes de texto.
“Las arepas son tan pequeñas que las llaman ‘botones’. Hoy le di la mía a un niño”, dijo Luis. “Siempre tienen hambre”.
El hacinamiento, la falta de comida e incluso falta de agua potable y jabón para lavarse las manos, han caracterizado los centros de aislamiento también de la Isla comunista, al grado de provocar escapes de sus pacientes.
