Descenso del 90% en la producción de cerdo obliga a importar más de 40 millones de euros en carne

Cuba produjo 149.000 toneladas de carne de cerdo en 2018 y solo 15.000 en 2022. (Captura de pantalla: ACN – YouTube)

La producción de carne de cerdo en Cuba ha sufrido un drástico descenso, cayendo un 90% en los últimos cuatro años, al pasar de 149.000 toneladas en 2018 a solo 15.000 en 2022. Esta situación ha llevado a la Isla a incrementar significativamente sus importaciones, llegando a gastar más de 40 millones de euros en 2022, más del triple de lo invertido en años anteriores.

Según datos publicados por la Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en Cuba para el Icex, la nación ibérica se ha convertido en el mayor proveedor de carne de cerdo del país caribeño. En 2022, desde el territorio europeo se exportó carne de cerdo por valor de 28.7 millones de euros, comparado con los 4.5 millones de euros en 2018.

El informe advierte sobre los riesgos de impago por parte del gobierno cubano, resaltando la escasez de divisas y el elevado nivel de impago a proveedores extranjeros. En ese sentido, el riesgo país de Cuba tiene clasificación E, siendo el mayor riesgo posible para una nación.

Según el Icex, el Estado comunista paga “habitualmente mediante transferencias o créditos documentarios que no superan los 180 días. En la situación actual, esta forma de pago supone un riesgo importante para el proveedor”.

“Las principales barreras de mercado en Cuba son las financieras. En el caso de operaciones con empresas estatales, lo principal es asegurar el cobro y operar dentro de unos límites que el proveedor pueda manejar sin mayor riesgo. La cobertura de operaciones en Cuba está muy dificultada por los retrasos y los impagos a proveedores, lo que obstaculiza las operaciones a descuento y la financiación externa. En muchos casos los proveedores tendrán que hacer frente a los aplazamientos con sus propios recursos”, destacan sobre los riesgos de comerciar con los comunistas.

No obstante, el informe considera que la situación de capacidad financiera de las Micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) es distinta a la del Estado. “Es importante tener en cuenta que el concepto Mipyme abarca también empresas de capital público. La normativa permite al Estado crear Mipymes públicas. Conviene tener clara la propiedad del capital antes de negociar una operación, pues las condiciones de riesgo son muy diferentes”.

En el caso de las Mipymes, el pago generalmente es por adelantado y el dinero llega desde cuentas en el exterior. “El riesgo país desaparece. El problema es que son empresas pequeñas que todavía no tienen envergadura suficiente para llevar a cabo compras internacionales”, asegura el informe.

Las tiendas estatales en divisas y los agromercados son los principales destinatarios de la carne de cerdo importada. Sin embargo, la producción local se vende exclusivamente en las tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC), limitando su acceso a una pequeña parte de la población que tiene dólares.