ESTADOS UNIDOS
DHS afirma que los beneficiarios del parole humanitario no están relacionados con el fraude
Muchos se preguntan cómo es que comunistas y represores del régimen castrista pueden entrar a EEUU bajo el parole
La llegada de cubanos a EEUU no solo simboliza un reencuentro familiar, sino también la apertura de nuevas puertas y oportunidades. (Foto referencial: Periódico Cubano)
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) reiteró que los beneficiarios del parole humanitario no están relacionados con el fraude y las inconsistencias detectadas en el programa, el hecho es atribuible a los patrocinadores.
Sin embargo, la comunidad cubana en el exilio se pregunta cómo es posible que comunistas y represores del régimen castrista pueden entrar a Estados Unidos con visas humanitarias sin mayores contratiempos.
En un comunicado emitido por el DHS se afirma que “todos los beneficiarios del parole humanitario son sometidos a un proceso de selección y verificación exhaustivo antes de su llegada a los EEUU. El proceso de selección y verificación de varios niveles para las autorizaciones de viaje por adelantado es independiente del proceso de selección de los partidarios que residen en los Estados Unidos. El DHS no ha identificado problemas preocupantes relacionados con el proceso de selección y verificación de los beneficiarios”.
El asunto de que comunistas y represores del régimen cubano se aprovechen de estas bondades para emigrar y pasar sus últimos días de vida en territorio estadounidense causa indignación entre la comunidad cubana en el exilio. Muchas personas que viven en Estados Unidos fueron reprimidos por los comunistas, y ahora los tienen de vecinos en Miami y en otras ciudades representativas del exilio cubano en el país norteño.
Muchos afirman que EEUU, bajo la administración demócrata, se ha convertido en un destino preferido para los antiguos miembros del PCC que, arrepentidos o no, intentan escapar del régimen que una vez defendieron con fervor.
En los últimos meses, han surgido múltiples casos de funcionarios del Estado cubano y sus familiares que han intentado ingresar a Estados Unidos a través de diversos medios, incluyendo el asilo político, reunificación familiar y el parole humanitario.
El programa de parole humanitario quedó suspendido temporalmente desde inicios de julio, cuando una investigación interna del DHS encontró problemas en el proceso de llenado del formulario I-34A, que sirve como petición del patrocinador hacia el beneficiario.
Por ejemplo, se reveló que 100.948 formularios I-134A fueron completados por solo 3.218 patrocinadores en serie. Además, se descubrió que 24 de los 1.000 números más utilizados pertenecían a una persona fallecida, y que direcciones físicas fueron usadas hasta 739 veces en más de 19.000 formularios, algunas de ellas correspondientes a unidades de almacenamiento en lugar de viviendas o códigos postales inexistentes.
El asunto ha escalado a tales niveles que el comité sobre Seguridad Nacional del Congreso de Estados Unidos exigió al secretario del DHS, el cubanoamericano Alejandro Mayorkas, que entregue documentos y comunicaciones relacionadas con la pausa del programa para hacer otra investigación.
Desde su implementación, el programa ha beneficiado a miles de cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos, otorgando 30.000 visados mensuales. Según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), 106.757 cubanos se han acogido al programa, de los cuales 104.130 han llegado a Estados Unidos y recibido la libertad condicional bajo este proceso, creado por una orden ejecutiva de Joe Biden.
