Empresa cubana comenzó a trabajar 24 horas para paliar la crisis del aceite

La Empresa de Aceites y Grasas Comestibles, en La Habana, se ha visto obligada a extender su jornada productiva a 24 horas para paliar el desabastecimiento de aceite que actualmente genera largas colas en todo el país, informó el diario Granma.

Harley Trujillo, director general de esa entidad, aseguró a la prensa que la producción y comercialización de aceite deben estabilizarse a este ritmo. La escasez, según dijo, se debió a la demora en la llegada de las materias primas desde el inicio del año.

Para Trujillo, “no existe dificultad para que se restablezca y se mantenga el aprovisionamiento en las tiendas”, teniendo en cuenta que las tiendas en divisa y la canasta básica familiar normada se benefician con la producción de más de 130 toneladas de aceite ejecutada diariamente en los últimos días.

Desde que comenzó esta “producción acelerada”, la Empresa de Aceites y Grasas Comestibles Habana ha entregado más de 700 toneladas de aceite, y aunque el directivo no definió el periodo de normalización de la entrega del producto, dejó claro que “no hay motivo para esperar una etapa de escasez”.

El plan de producción de la empresa oscila entre las 1.500 y 1.600 toneladas mensuales, y en lo que va de año se ha cumplido con la producción de unas 2.965 toneladas (hasta el 28 de febrero).

La entidad, de acuerdo con su director, tiene concebido un incremento de 5.000 toneladas con respecto a periodos anteriores, en correspondencia con el crecimiento de las demandas de la población y del sector no estatal.

El desabastecimiento generalizado del aceite fue reconocido en días recientes por el mandatario cubano Miguel Díaz-Canel, quien indicó a su Ejecutivo “analizar y proponer solución de inmediato” un problema que también impacta en la venta de pollo, huevo y harina.

“Estamos tratando de impulsar la eficiencia en la administración pública y la gestión de gobierno a todos los niveles”, dijo el sucesor de Raúl Castro en aquel momento.

En el estilo de trabajo, agregó, tiene que haber momento para que “rindamos cuenta ante la población, ante las estructuras de dirección superiores, ante la Asamblea Nacional. Rendirle cuentas al pueblo es un ejercicio constante de superación”.