ESTADOS UNIDOS
Empresa que administra Hialeah Hospital y Palmetto Hospital se declara en bancarrota
“Hicimos todo lo que está a nuestro alcance para operar”, pero tenemos “insuficientes reembolsos por parte de los pagadores del gobierno y costos laborales disparados”

El Hospital Palmetto de Hialeah es uno de los centros sanitarios más importantes de la ciudad. (Foto © Periódico Cubano)
La empresa Steward Health Care, que gestiona varios hospitales en la Florida, incluidos el Hospital de Hialeah y el Hospital Palmetto, se declaró en bancarrota debido a problemas financieros, lo cual ha desatado las preocupaciones de la comunidad. Incluso, dada la importancia de estos centros sanitarios, el alcalde de Hialeah, el cubanoamericano Esteban Bovo tuvo que declarar que está al tanto de la situación.
Medios de prensa en Dallas, Texas, donde está ubicada la sede de la compañía, señalan que Steward Health Care se ha acogido al Capítulo 11 de la ley de quiebras en Estados Unidos, lo cual permite hacer una restructuración de la situación financiera del grupo.
La compañía es uno de los operadores de hospitales más grandes de EEUU, pues en su portafolio tiene cerca de 4.450 centros sanitarios donde emplea a más 30.000 personas y atiende a millones de pacientes cada año.
Los hospitales afectados incluyen no solo aquellos en el condado de Miami-Dade, sino también en Broward y otros condados de Florida, destacando una red de atención que atiende a una amplia población. Además de Hialeah Hospital y Palmetto Hospital, Steward opera el Coral Gables Hospital, North Shore Medical Center, Florida Medical Center, Melbourne Regional Medical Center, Rockledge Regional Medical Center y Sebastian River Medical Center.
La continuidad de la atención a los pacientes estaría garantizada
Ralph de la Torre, director ejecutivo de Steward Health Care, explicó que la decisión de reestructuración bajo el Capítulo 11 busca proteger el bienestar de pacientes, médicos y empleados. “Hicimos todo lo que está a nuestro alcance para operar con éxito en un entorno de atención médica altamente desafiante”, afirmó de la Torre. Sin embargo, tienen “insuficientes reembolsos por parte de los pagadores del gobierno y costos laborales disparados”.
No obstante, el comunicado oficial asegura que durante el proceso de declaración de bancarrota el funcionamiento de los hospitales no debería verse afectado.
Por su parte, un portavoz de la Agencia para la Administración de Atención Médica de Florida también intervino en el tema para decir que se está “trabajando de cerca con todos los sectores afectados para mitigar cualquier impacto negativo de esta situación”.
My office is aware that Steward Health, the parent company for Hialeah and Palmetto Hospitals, has filed for Chapter 11 Bankruptcy. pic.twitter.com/TnnWVEgcnl
— Esteban Bovo (@MayorBovo) May 6, 2024
¿Qué pasa cuando una empresa en EEUU se declara en bancarrota?
Cuando una empresa en EEUU se declara en bancarrota, está indicando que no puede cumplir con sus obligaciones financieras y necesita reorganizar o liquidar sus activos bajo la protección de la ley de bancarrota.
Específicamente, el Capítulo 11 es muy útil para las empresas que enfrentan dificultades financieras, pero que desean seguir en funcionamiento. Bajo dicho procedimiento, la compañía puede elaborar un plan de reorganización para modificar los términos de pago a los acreedores, el cual necesita ser aprobado tanto por los acreedores afectados como por el tribunal de bancarrotas.
Durante este proceso, la empresa puede negociar con sus acreedores para reducir las obligaciones de deuda y alterar los términos del contrato para reflejar mejor su capacidad actual de pago, buscando alcanzar un equilibrio que le permita recuperarse financieramente y eventualmente volver a ser rentable, todo esto bajo la supervisión judicial y con protección contra litigios y cobros.
Los hospitales en EEUU que se declaran en bancarrota enfrentan resultados variados. Muchos utilizan el Capítulo 11 para reorganizar deudas, otros son adquiridos por entidades mayores, lo que puede proporcionar estabilidad y recursos adicionales. Sin embargo, algunos hospitales no logran reorganizarse exitosamente y pueden cerrar, afectando negativamente el acceso a la atención médica en sus comunidades y la economía local.
El impacto del cierre es significativo, particularmente en áreas donde el hospital es un proveedor principal de servicios de salud. La viabilidad a largo plazo de los hospitales que emergen de la bancarrota depende de la gestión eficiente y las condiciones del mercado de atención médica.
