Estudiante cubano bajo sospecha de coronavirus: Su hermana viajó a Panamá y “sí está infectada”

Estudiante internado en la IPK por sospecha de coronavirus comenta al respecto (REVISTA ALMA MATER/FACEBOOK).

Las autoridades de Cuba se encuentran investigando varios posibles casos de coronavirus, tres de ellos de presuntos estudiantes de la Universidad Tecnológica de La Habana José Antonio Echeverría (CUJAE) y sus familiares.

Se informó que los pacientes ya fueron internados en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK) a la espera de la confirmación.

Uno de los estudiantes que cursa la carrera de Arquitectura, Adrián Fleites, es uno de los presuntos contagiados y habría adquirido el virus tras entrar en contacto con su hermana que visitó hace unos días Cuba procedente de Panamá.

El joven declaró a la revista oficialista Alma Mater que hay una “probabilidad” de que sea un caso positivo.

“Todo lo que dicen por ahí es un chisme. No me han confirmado que tenga coronavirus, pero hay probabilidades de que dé positivo, pues mi hermana, que ahora está en Panamá ingresada, sí está infectada y estuvo aquí (en la Isla) hace 5 días. Mis padres, dos amigas y yo estamos en el IPK. Hoy nos confirman nuestro estado”, explicó.

Las otras dos jóvenes a las que se refiere Fleites son Sheila Albo y Danae Pavón, también estudiantes de Arquitectura.

Puesto que no sabía que existía la posibilidad de portar el virus, el joven estableció contacto con varios de sus compañeros de clases, por lo que se generó preocupación entre los alumnos.

La dirección del centro docente decidió rápidamente tomar medidas como suspender la inauguración de los juegos deportivos universitarios, que debía celebrarse este marzo.

“Debemos evitar las grandes aglomeraciones que puedan provocar el contagio de alguien infestado”, señaló en un comunicado.

“Mantendremos informada a la comunidad universitaria de todo lo que acontezca y nos sea confirmado respecto a este asunto”, añadió.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró al coronavirus como una pandemia y pidió a las naciones hacer todo lo necesario para controlarlo.

No obstante es necesario recordar que el COVID-19 tiene una tasa de mortalidad de sólo el 2% y las víctimas mortales en todo el mundo han sido en su mayoría adultos mayores con enfermedades previas.