ESTADOS UNIDOS
Exoficial de Hialeah es condenado a más de cinco años de prisión por secuestro
Rafael Otano también enfrenta cinco años de libertad condicional
El expolicía Rafael Otano fue absuelto del cargo de agresión. (Captura de pantalla: Local 10 – YouTube)
Rafael Otano, exoficial de Hialeah, fue sentenciado a cinco años y medio de prisión y a cinco años de libertad condicional por ser parte del secuestro de un hombre sin hogar, identificado con el nombre de José Ortega Gutiérrez, informó Telemundo 51.
En la audiencia de este miércoles, la defensa del procesado presentó una solicitud de reducción de condena, como parte de un esfuerzo por persuadir a la jueza Andrea Wolfson de apartarse de las pautas de sentencia y aplicar una pena menos severa al exagente.
La magistrada rechazó la petición, argumentando que no creía que Otano, quien mostraba signos de temor y tristeza mientras testificaba ese día, expresara verdaderos remordimientos por sus acciones, más bien parecía lamentar haber sido descubierto.
La jueza calificó las acciones de Otano como una traición extremadamente atroz a la confianza pública y dictaminó dicha sentencia. Cabe recordar que el pasado 29 de agosto, un jurado lo declaró culpable por dicho delito, pero lo absolvió del cargo de agresión. En el caso también se encuentra involucrado el exagente Lorenzo Orfila.
El abogado del expolicía, Michael Pizzi, manifestó su desconcierto ante la decisión hacia su cliente. “Creemos que es un escándalo. El veredicto es totalmente absurdo, si como determinó el jurado el Sr. Otano nunca lo golpeó, no es culpable de agresión, no es culpable de tocar a esta persona, no puede ser culpable de secuestro”, dijo el litigante.
Los hechos se desencadenaron cuando Otano y Orfila, aún no juzgado, respondieron a una queja del dueño de un negocio que alegaba que Ortega Gutiérrez estaba alterando el orden público en un centro comercial, el pasado mes de diciembre.
El indigente pasó de ser sospechoso a víctima según los fiscales, luego de que dichos agentes lo arrestaran, lo expulsaran del área asignada y lo golpearan en un basurero ilegal en las afueras de Hialeah.
Durante el juicio, los abogados defensores centraron sus esfuerzos en desacreditar a la víctima, resaltando sus condenas penales y su alcoholismo. Ortega Gutiérrez admitió ante el jurado que era un bebedor con un historial criminal, pero sostuvo que fue golpeado por los policías.
Orfila también enfrenta cargos de secuestro, agresión e intento de mala conducta oficial, con evidencia de registros de teléfonos móviles y GPS que los ubicaron cerca de la plaza comercial y posteriormente cerca del vertedero donde la víctima afirmó haber sido golpeada.
Días posteriores al incidente, Ortega Gutiérrez reveló que un individuo identificado como Ali Amin Saleh, quien afirmó ser un investigador privado, se aproximó a él y le ofreció la suma de 1.200 dólares en efectivo a cambio de que firmara una declaración jurada en la cual afirmara haber sido detenido por consumo de alcohol y negara haber sido objeto de agresión por parte de policías.
Saleh enfrentó acusaciones de manipulación en relación con este episodio. El notario Juan Prietocofino, que rubricó dicha declaración jurada, admitió su culpabilidad el 7 de agosto por fraude notarial. Este hombre procesó la declaración jurada falsa respecto a la supuesta golpiza, en la que la víctima habría presentado una versión diferente de los hechos.
