Expropian finca a campesino de Artemisa por involucrarse en hurto y sacrificio de ganado

El Ministerio del Interior (Minint) de conjunto con el de la Agricultura, expropió la finca de un campesino en la provincia de Artemisa luego de acusarlo por hurto y sacrificio de ganado mayor, un delito tipificado en el Título X, Capítulo I, Sección Decimosexta del actual Código Penal cubano.

De acuerdo con el diario oficialista El Artemiseño, el pasado 27 de enero se detectó un hecho de hurto y sacrificio de ganado mayor en la finca El Chorro, ubicada en la zona limítrofe de los municipios San Cristóbal y Candelaria. Poco más de una semana después se procedió a la confiscación de la finca, aunque hasta el momento no ha trascendido la celebración de un juicio. Un total de tres ciudadanos están en prisión provisional, pero uno de ellos, ya empezó a sufrir las consecuencias del encierro.

Según informa Alcides López Labrada, delegado provincial de la Agricultura en Artemisa, “al propietario de la finca Jejenes y usufructuario de otros dos terrenos —encontrado en el hecho— se le realiza el proceso de extinción de los usufructos e iniciaremos la confiscación de la propiedad”.

La policía intervino la finca el pasado 27 de enero producto de una delación de vecinos que refirieron “que el lugar parece funcionar como punto de confluencia de malhechores dedicados a estas actividades de hurto y sacrificio de ganado”.

En el momento del operativo se encontró una vaca sacrificada y sacos de carne guardados en una nevera. La información oficial precisa que “también se ocupó un arma de fuego y municiones pertenecientes a una segunda arma”.

No obstante, la mayoría de los ganaderos de Bahía Honda, Caimito, San Cristóbal y Candelaria, municipio con más altos índices de robos de ganador, “están insatisfechos con el enfrentamiento de las autoridades locales del orden interior a estos delitos”.

Aumento de la violencia por sacrificio de ganado

Recientemente, transcendió por redes sociales que el campesino cubano Yordany Díaz, residente en el poblado de Juraguá, ubicado en el municipio cienfueguero de Abreus, fue asesinado por ladrones a los que enfrentó cuando mataban a uno de sus animales en la finca.

En Cuba la policía no hace acto de presencia para vigilar este tipo de delitos, y mucho menos en las zonas rurales. Los agentes del orden cumplen funciones represivas con el objetivo de evitar que el pueblo se subleve contra los dirigentes comunistas que han dirigido la Isla a sus anchas durante más de 64 años.

Estos hechos se hacen más frecuentes en la medida que se experimenta un crecimiento de la escasez de alimentos en Cuba.