James, el gato de Julian Assange ¿Qué pasó con él?

El carismático y auténtico gato atigrado llamado James, perteneciente al activista Julian Assange, se caracterizaba por aparecer en las ventanas de las oficinas ecuatorianas, causando una sensación mediática en redes sociales.

Al terminar el asilo político para Julian, la Policía ecuatoriana nunca precisó el paradero de James, un felino que nos hijos del activista australiano le regalaron para acompañarlo en su estadía por Ecuador y que siempre llamada la atención por vestir  muy elegante con corbata roja y con pose de funcionario para asomarse en las ventanas de la embajada.

Las asociaciones animalistas se preguntaban el paradero del gato, porque desde que culminó la estancia de Julian en Ecuador no se supo más del gato, por lo que el canciller ecuatoriano José Valencia, explicó que el felino fue entregado a los familiares del activista a finales del año pasado, por lo que se encuentra sano y salvo.

James, el gato más simpático que llamaba la atención de la prensa internacional así como de propios y extraños, también tenía su propia cuenta de Twitter en donde posteaban las poses que el minino hacía entre las ventanas y de manera inesperada.

Con Información de AméricaTeVé