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La escasez de medicamentos en Cuba es peor para los pacientes con problemas mentales
“Apenas se encuentran y es muy difícil sustituirlos, no es como un antibiótico”
La escasez de medicamentos en Cuba continúa siendo un problema serio que afecta a los residentes de la Isla, esto pese a que el Gobierno aseguró que la producción de fármacos iniciaría esta semana.
“Realmente hay serias dificultades con los medicamentos. En mi especialidad, que es la psiquiatría, apenas se encuentran y es muy difícil sustituirlos, no es como un antibiótico que si el germen es sensible lo puede sustituir por otro al cual ese germen sea sensible”, declaró el doctor bayamés Sergio Pérez a Radio Martí.
De acuerdo con Pérez, quien se especializa en suicidología, el problema se debe a que no puedes sustituir muchos de los medicamentos usados en psiquiatría, pues el tratamiento no surtiría efecto.
“No puedes sustituir un antidepresivo por un neuroléptico o un ansiolítico porque el efecto es nulo. Es decir si la persona necesita un antidepresivo, requiere un antidepresivo, cualquiera sea el que haya. En la mayoría de las ocasiones no se encuentra”, indicó.
De igual manera, explicó que la gente ha estado sustituyéndolos por medicina tradicional, lo cual no sirve para nada y a la larga termina provocando que la enfermedad empeore.
El galeno indicó que las instituciones mentales terminan rechazando a los pacientes porque no tienen cómo tratarlos.
“Yo envié, antes de jubilarme, a dos personas para ingresar por su elevado riesgo de suicidio y como no había cama, los enviaron para la casa y los dos se suicidaron”.
Pérez renunció a la Sociedad Cubana de Psiquiatría en mayo debido al silencio que guardaron sus colegas respecto al maltrato que recibió el artista independiente Luis Manuel Otero Alcántara durante su estadía en el Calixto García.
Por su parte, la activista Midaisy Marrero Gil, quien reside en Cienfuegos, relató al citado medio que perdió a un hermano debido a una enfermedad mental y a la falta de tratamiento.
“No teníamos con qué controlar sus crisis. Cada vez que lo llevábamos al médico le ponían una inyección diferente. Hasta que cayó en una enfermedad llamada ‘síndrome neuroléptico maligno’ debido a la variedad de antipsicóticos. Lo saqué caminando de mi casa y lo traje muerto ocho días después en una caja porque tampoco había, en el hospital, antibióticos para atenderlo en una sala de cuidados intensivos”.
Medios oficialistas culpan abiertamente a EEUU de esta escasez de medicamentos, argumentando que el embargo impuesto al régimen les impide conseguir los fármacos que requieren.
Es necesario mencionar que pese a esto, el Gobierno castrista se dio el lujo de rechazar la petición de exiliados cubanos de abrir un corredor humanitario, tratando la sugerencia como un insulto personal.