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El Floridita recibe prestigioso reconocimiento por conservar el legado de Ernest Hemingway
El galardón fue otorgado por el Movimiento Literario e Histórico Internacional Ernest M. Hemingway
El académico Alfredo A. Ballester fue el encargado de entregar el reconocimiento. (Foto © Cortesía de Alfredo A. Ballester)
En una ceremonia realizada en el icónico restaurante Floridita de La Habana, se entregó un reconocimiento especial al establecimiento por parte del Movimiento Literario e Histórico Internacional Ernest M. Hemingway.
El fundador y presidente de esta organización, el Académico Alfredo A. Ballester, radicado en Estados Unidos, compartió en exclusiva a la redacción de Periódico Cubano que el galardón fue otorgado por haber conservado el legado del renombrado escritor estadounidense.
Reconocimiento entregado al bar Floridita por mantener la memoria de Ernest M. Hemingway. (Foto © Cortesía de Alfredo A. Ballester)
La entrega del reconocimiento se llevó a cabo en el emblemático sitio que el autor de El viejo y el mar solía frecuentar durante sus estancias en Cuba, y que a la postre se convirtió en un bar-restaurante insignia vinculado al autor de obras tan influyentes como ¿Por quién doblan las campanas?, además de ser ganador del Premio Pulitzer en 1953 y del Premio Nobel de Literatura en 1954.
En 2020, dicha organización literaria llegó a otorgar una medalla post mortem al mencionado autor, la cual se encontraba colocada en el busto de bronce que decora el establecimiento, pero fue retirada por motivos de seguridad.
Medalla post mortem para el escritor estadounidense Ernest M. Hemingway. (Foto © Cortesía de Alfredo A. Ballester)
Uno de los elementos que destaca en el Floridita es el daiquirí, un cóctel que se ha convertido en parte esencial de su historia. Este trago, que se prepara con ron blanco, jugo de limón, azúcar y hielo, ha sido celebrado en todo el mundo. Se dice que fue en ese lugar donde se perfeccionó y popularizó la receta tal como lo conocemos hoy día.
El reconocimiento al restaurante también se debe a la creación de un cóctel especial en honor a Hemingway, conocido como “Papa Hemingway”. El trago es una muestra de cómo el restaurante ha sabido mantener viva la memoria del escritor y su conexión con la cultura cubana.
Los turistas siempre aprovechan para tomarse fotografías con el busto de bronce de Ernest M. Hemingway. (Foto © Cortesía de Alfredo A. Ballester)
El Floridita abrió sus puertas en 1817 como una modesta taberna, y fue evolucionado con el tiempo para convertirse en un bar y restaurante de renombre internacional. A lo largo de los años, ha sido un punto de encuentro para escritores, artistas y celebridades.
El restaurante mantiene una decoración que evoca la Cuba de principios del siglo XX, creando un ambiente clásico y nostálgico que transporta a los visitantes a tiempos pasados. Además, ofrece música en vivo y una experiencia de coctelería única que atrae a numerosos turistas que desean experimentar la auténtica cultura y tradición cubana.
La ubicación privilegiada del negocio en la esquina de las calles Obispo y Monserrate en La Habana Vieja, lo convierte en un punto de referencia en una zona concurrida y turística de la ciudad, donde tanto lugareños como visitantes pueden disfrutar de la historia, así como tomarse fotografías junto a la estatua en bronce del escritor.
