HUMOR Y SÁTIRA
La surreal historia de un Moskovitch con chapa de tour en Cuba contada por el humorista Jardiel
El dueño del carro no quería seguir haciendo colas largas por combustible
El artista asegura que el dueño del vehículo quería librar la fila de autos particulares por gasolina. (Captura de pantalla: Cubaracingnow – YouTube / Jardiel Humorista – Instagram)
Recientemente, una historia del humorista cubano Jardiel González hace reír y a la vez impresiona, pues según contó el artista, a una cola de gasolina en La Habana llegó un hombre en un auto de la marca Moskovitch con chapa de tour, un hecho muy curioso.
La persona en cuestión fue directamente para la fila de los carros de turismo, porque es más corta la cola para acceder al combustible. “Se apareció con una chapa con una T delante, yo no sé cómo inventó eso, el cubano es loco. Para la locura hay que tener ideal, esta locura que se vive aquí, qué tú vas a sacar, locos nada más, cubanos, locos”, dijo el actor.
Según Jardiel, al hombre se lo llevaron de aquel sitio, no sabe si preso. Los comentarios a la publicación del humorista no se hicieron esperar. Muchos reían con la historia y con la inventiva de los habitantes de la Mayor de las Antillas en un país en decadencia.
“Se pasan los cubanos, mira a lo que nos lleva la necesidad jajajaj”; “Mira que el pobre cubano tiene que inventar para poder vivir en ese sing.. país”; “Claro que las locuras generan ideas locaaasss”.
View this post on Instagram
Al igual que la anécdota del señor del Moskovitch, ante la terrible situación del combustible en la Isla, otras ideas florecen en la mente del cubano, acostumbrado a sobrevivir.
En una entrevista exclusiva para América TeVé, dos residentes en Las Tunas, creadores de una «refinería criolla», explicaron cómo logran tener combustible. Los antillanos dijeron que por medio de un proceso de destilación por condensación de los gases que emanan de la combustión de un kilogramo de plástico, producen poco menos de un litro de gasolina.
Dairon Matos, uno de los inventores, confesó que junto con un amigo buscaron en Internet cómo hacer los dispositivos necesarios para obtener gasolina. Después de tener todo listo, hicieron la primera prueba en el patio de su casa, ubicada en el municipio tunero de Manatí. En la primera ocasión, llegaron a elaborar ocho litros de gasolina.
Según Matos, quien utiliza la teoría aplicada en cualquier refinería de petróleo, entre más se enfríe el condensador, mayor será el octanaje y la calidad de la gasolina producida. Los creadores de este proyecto tienen grandes planes y esperan que algún día pueda convertirse en una pequeña o mediana empresa de producción de gasolina para ayudar a lidiar con la crisis en Cuba.
La situación del combustible no tiene para cuándo acabar, pues el régimen no da una solución coherente a la situación. La semana pasada, un buque que transportaba diésel llegó a Cuba y comenzó a descargar en la Base de Supertanqueros de la Zona Industrial de Matanzas. A pesar de la buena noticia, la prensa oficialista informó que la cantidad no sería suficiente para cubrir las necesidades del país. Por lo tanto, se esperan más largas filas en las estaciones de servicio y también apagones debido a la escasez de generación de energía.
