López-Calleja viaja a Caracas para vigilar la visita oficial de Manuel Marrero

El general de división Luis Alberto Rodríguez López-Calleja, quien fuera durante un tiempo yerno de Raúl Castro, viajó a Caracas con la misión de vigilar la “refundación creadora y profunda” de las relaciones entre Cuba y Venezuela, escenificada por el primer ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, y el mandatario venezolano, Nicolás Maduro.

López-Callejas, presidente del Grupo de Administración Empresarial S.A (GAESA), apareció en varias fotos, ocupando una posición de privilegio durante la visita de la delegación cubana que fue recibida por Maduro en el Palacio de Miraflores.

Por Cuba también estuvieron el ministro de Salud, José Ángel Portal Miranda, y la viceministra de relaciones exteriores, Josefina Vidal, quien muchos aseguran que se perfila para suceder al canciller Bruno Rodríguez Parrilla tras su deteriorado estado de salud.

El sucesor de Hugo Chávez dijo este pasado martes que la reunión fue “buena e intensa”, persiguiendo el objetivo de ir “orientando el camino hacía una refundación creadora y profunda del mapa de cooperación entre Cuba y Venezuela”.

“Hemos decidido hacer una refundación creativa y profunda para que nuestra cooperación vaya adaptada a los nuevos tiempos, a la nueva época y permita impactar positivamente la vida social, la vida económica, la vida cultural del pueblo de Cuba y del pueblo de Venezuela”, ratificó Maduro.

Por su parte, Marrero indicó que “nosotros en cualquier circunstancia vamos a continuar cooperando con Venezuela, (…) defendiendo a Venezuela, y apoyando al presidente Maduro”.

Las intervenciones se sucedieron bajo la observación de López-Calleja, uno de los personajes que ostenta el verdadero poder en la cúpula dirigente de la junta militar que gobierna Cuba desde la sombra.

Hace solo unos meses, el general de brigada fue nombrado como diputado a la Asamblea Nacional de Poder Popular (ANPP), aprovechando una vacante por el municipio de Remedios luego del fallecimiento del anterior legislador de esa localidad.

En teoría, López-Calleja, con sus más de 60 años, no puede ocupar el cargo de presidente de Cuba, una figura que tiene que emanar desde la ANPP. Sin embargo, para la cúpula del poder nada es imposible, pues son capaces de modificar sus propias leyes a conveniencia.

El último ejemplo de quebrar la ley del límite de edad tuvo lugar hace menos de dos semanas, cuando el General de Cuerpo de Ejército Ramón Espinosa Martín, actual viceministro de las Fuerzas Armadas (FAR), fue ascendido a miembro del Buró Político y del Comité Central del Partido Comunista.

Según Roberto Morales Ojeda, secretario de Organización del PCC, se trató de una “excepción” que fue consultada a los miembros del secretariado. Todos votaron a favor para quebrar el estatuto establecido en el 8vo Congreso del PCC.