Madres cubanas y sus hijos en la incertidumbre por falta de viviendas seguras en La Habana

Cinco madres cubanas y sus hijos pequeños, que desde hace dos meses ocupan ilegalmente un local estatal en la Habana Vieja, se encuentran en la incertidumbre debido a que el Gobierno no le ha dado una solución a los daños estructurales que presentan sus respectivas viviendas.

En entrevista con CubaNet, Yeina de los Santos Vásquez explicó que han entregado cartas exponiendo sus casos al Gobierno Provincial, a la Asamblea Nacional y al Consejo de Estado, pero en ni una de estas instancias han recibido alguna respuesta concreta.

“Aquí estamos esperando para ver que nos dicen, en el Consejo de Estado nos dijeron que no podían sacarnos de aquí hasta tanto no se investiguen nuestros casos y nos den respuesta”, comentó de los Santos Vásquez.

Ariadni Ceballos Domínguez, otra de las madres que vive en el local perteneciente a la Oficina del Historiador y ubicado en la calle Inquisidor número 305, manifestó que los vecinos de la zona también firmaron los documentos presentados para demostrar la credibilidad del problema.

Como en otros casos relacionados con el déficit de vivienda, las madres han recibido la visita de funcionarios que tomaron fotografías de las casas que ellas tuvieron que abandonar por los diversos daños, supuestamente, para mostrárselas a autoridades de alto nivel.

“Nos llevaron a cada una a nuestras casas y tomaron fotos de los techos de las paredes, de todo, y nos dijeron que nos darían una respuesta lo antes posible”, indicó Lilian Relet Díaz.

Entre los funcionarios que fueron a constatar el problema, se encuentra un arquitecto de la Oficina del Historiador que tenía las intenciones de medir el local para un proyecto de vivienda, pero las madres no lo dejaron pasar por miedo a que sea una trampa del gobierno para expulsarlas.

Tras rechazarlo, fueron a dicha oficina donde una funcionaria identificada como Mayté les dijo que sí habían enviado a un arquitecto y además les mencionó que el caso probablemente se resuelva.

Con el paso de los años, el déficit de vivienda en la Isla cada vez entra a un estado más crítico por la falta de capacidad del régimen para acciones de mantenimiento o reparación, esto ha ocasionado derrumbes, algunos con saldos mortales, y que varias familias vivan en hacinamiento.

El pasado mes de septiembre, el gobierno reconoció su ineficiencia al anunciar la eliminación completa del subsidio para la construcción de viviendas, que iba del 76 al 82 por ciento y se entregada desde 1985.