Niña cubana estuvo a punto de comer una mortadela de la libreta repleta de pelos

Alimentos de pésima calidad se venden en las bodegas cubanas (Foto ilustrativa: Periódico Cubano)

Los cubanos siguen denunciando situaciones desagradables con el consumo de alimentos vendidos por el Estado a través de la libreta de abastecimiento.

Marcia Fernández, residente en Camagüey, denunció en redes sociales que su hija estuvo a punto de comerse un pedazo de mortadela con pelos comprada a 17.00 pesos en una bodega.

Ante el desagradable suceso, la mujer hizo un fuerte cuestionamiento acerca de la labor que están realizando los técnicos encargados de procurar la calidad y la distribución de los alimentos.

“¿Hasta cuándo tenemos que permitir esta falta de respeto y humanidad?, ¿Qué hacen los dirigentes de la Empresa Cárnica de Camagüey que no supervisan esta distribución antes de que llegue al pueblo con la mala calidad?”, preguntó Fernández al mostrar imágenes del pedazo de carne con pelos.

(Foto: Marcia Fernández – Faceboook)

La madre también cuestionó si las autoridades igual se comen la mortadella con pelos de animal.

En los comentarios, otras usuarias denunciaron situaciones similares con el mismo producto.

Yakelin Cobas dijo que la mortadella ofertada en la bodega donde le toca comprar tenía un tono de color muy blanco y se veía de pésima calidad.

“La mía tenía un pedazo de alambre que se me encarnó en el cielo de la boca. Mientras menos calidad tienen los productos más caro valen. Comemos desperdicios con precio de faisán, ¿será que no nos respetan? ¿Qué me dicen de esto los Patria o Muerte?”, manifestó Martiza Guindo.

Otros internautas comentaron que la mortadella en la Isla está hecha de desperdicios cárnicos de varios animales y se descuida mucho su producción debido a que no es un producto para exportar.

“Cuando no hay competencia ni dolientes, las cosas siempre terminan relajándose y no importa como queden, es la única opción. La propiedad privada ha demostrado ser más eficiente, porque les conviene mantener a sus clientes contentos”, indicó un internauta.

En los comentarios también se dijo que mientras las autoridades cubanas y sus hijos comen langosta de primera, jamón de España y res de Estados Unidos, los cubanos de a pie les tocan alimentos como la mortadella con pelos.

El pasado mes de febrero, una madre de Las Tunas denunció que su hija estuvo a punto de comerse una garrapata que estaba en un pan comprado a través de la libreta.

“Esto es comida para cochinos, no para niños”, dijo la menor al ver el insecto en dicho alimento que es de consumo básico para los cubanos.