MUNDO
Nueva política migratoria de Biden agudizaría la crisis humanitaria en las ciudades fronterizas de México
Los albergues se encuentran saturados y autoridades locales no cuentan con recursos para atender a miles de indocumentados varados
Activistas y autoridades locales en las ciudades fronterizas de México alertan que no cuentan con las condiciones para atender las deportaciones, realizadas a través de la nueva política migratoria de Joe Biden.
La administración demócrata anunció en días pasados un amplio plan para frenar la llegada masiva de personas procedentes de Cuba, Nicaragua y Haití. Previamente, ya se había empezado a aplicar a venezolanos.
Como ahora se tienen que cumplir con ciertos requisitos para poder ingresar a la nación norteamericana para solicitar asilo, se teme que las devoluciones de indocumentados empeoren la crisis humanitaria en las localidades fronterizas de la nación azteca.
Héctor Joaquín Silva de Luna, dirigente de los albergues Senda de Vida I y II, aseguró que estos refugios y otros, principalmente los ubicados en Reynosa, Tamaulipas, ya se encuentran saturados de migrantes varados.
“Hay extranjeros que cuentan con más de medio año esperando una resolución a su proceso de asilo, pero esta petición avanza lentamente porque se lleva a cabo mediante abogados particulares”, explicó el activista.
Silva de Luna comentó al medio Sol de Tampico que han solicitado la edificación de otro albergue al gobierno estatal, para que más familias de migrantes tengan un lugar seguro donde esperar una respuesta sobre la petición de asilo.
“No les pediríamos que se vayan a otro lugar porque el enfoque de estar aquí esperando su turno para enterar a los Estados Unidos esto no nos corresponde, nosotros les pedimos que no haya descontrol, solo tener paciencia”, añadió el director Héctor Silva.
Carlos Víctor Peña, alcalde de Reynosa, explicó que su ciudad no cuenta con los recursos necesarios, ni albergues suficientes, para atender al arribo de miles de migrantes de forma paulatina con el objetivo de ingresar a EEUU.
“Hemos construido un centro migratorio nuevo y aportado recursos municipales para poder atender a la población migrante que se encuentra en la ciudad, pero hay que reconocer cuando ya no se puede”, manifestó el funcionario.
La nueva estrategia migratoria de la administración demócrata motivó al Instituto Nacional de Migración de México a desplegar a casi 100 agentes en la zona correspondiente a Ciudad Juárez, donde también existe un alto número de indocumentados.
Los oficiales se encuentran posicionados en el borde del Río Bravo para evitar cruces y también para auxiliar a los deportados.
El gobierno de Biden puso en marcha un parole humanitario que solo beneficiará a quienes encuentren un patrocinador en EEUU. Además, se impondrán penalizaciones a personas que ingresen a este país sin fundamento legal.
Entre las medidas se encuentra una aplicación llamada CBP One para que desde ella se inicie el trámite de la solicitud de asilo, sin la necesidad de arribar a la frontera sur.
