Pablo supera a Silvio Rodríguez en la lista de las “50 canciones más inolvidables”

Silvio Rodríguez y Pablo Milanés (Foto: Instagram de los cantantes)

El pasado lunes 21 de septiembre, por el Día Mundial del Alzheimer, la BBC publicó una lista de las cincuenta canciones más icónicas que nunca serán olvidadas.

Según indicó el portal británico, la nómina multilingüe y multicultural recoge todos aquellos temas “inolvidables”, capaces de consolidar una relación entre el recuerdo y la música.

El ranking fue elaborado con la ayuda de 1.500 lectores —a quienes se les preguntó qué éxitos llevarían a una isla desierta— y las canciones más repetidas fueron incorporadas.

En la lista aparecen varios sencillos cubanos. El primero, ocupando la octava posición, es “Para vivir” de Pablo Milanés y nueve casillas más abajo se puede leer, en el 17 escaño, “Ojalá” de Silvio Rodríguez. Los nombres de Celia Cruz y Buena Vista Social Club también figuran.

Para muchos isleños, esta distinción podría abrir aún más la brecha de quienes en algún momento fueron amigos.

Amigos y fundadores de la Nueva Trova

Nacido en Bayamo, el 24 de febrero de 1943, Pablo comenzó a cantar en grupos y conjuntos dedicados a la canción tradicional. Silvio, tres años menor, estudió piano pero lo abandonó pronto. A raíz de su entrada al servicio militar y contacto con poetas y escritores en los inicios de la revista El Caimán Barbudo, empezó a escribir sus primeras canciones.

Poco a poco, tras conocer a otros artistas —Noel Nicola, Augusto Blanca, Vicente Feliú, Martín Rojas y Eduardo Ramos— fundaron el movimiento de la Nueva Trova, apoyado por la Casa de las Américas.

“Al principio no todo el mundo entendía lo que queríamos hacer. Eran canciones que para uno resultaban demasiado críticas y para otras excesivamente novedosas (…) No solo hacíamos canciones que cantaban los logros de la revolución, sino también sus imperfecciones y defectos, y eso no era muy bien entendido en aquella época”, explicaron los dos cantautores en una entrevista concedida al diario español El País en 1986.

La amistad de Silvio y Pablo se hizo más fuerte luego de colaborar estrechamente en el grupo de experimentación sonora del Instituto Cubano de Artes e Industrias Cinematográficas (ICAIC), formado en el año 1970 bajo la dirección del guitarrista y compositor Leo Brouwer.

El fin de una desgarrada amistad

Sin embargo, algo sucedió en el 2011 que terminó de romper una unión que ya llevaba algún tiempo desgarrada. En agosto de ese año, Milanés dijo sentir vergüenza e indignación ante los maltratos perpetrados por el Gobierno de Cuba contra el grupo opositor las Damas de blanco.

Un mes más tarde, Silvio tachó de “burda y sin compromiso afectivo” la forma en que su colega se manifestó con respecto a la realidad política de la Isla. Incluso, llegó a confesar que él y Pablo hacía más de dos décadas que no se veían o hablaban por teléfono.

“Otra cosa que duele es que haya manifestado esas críticas en Miami, a unos días de un concierto que, por más propaganda que hacían, no se llenaba (…) Y para colmo que las hiciera a medios que tildan de héroes a terroristas que han derribado aviones civiles, medios cuyos dueños han pagado actos de violencia contra Cuba”, escribió el trovador en su blog Segunda Cita.

“El Pablo que conozco tiene casi un cuarto de siglo de retraso”.