Policía acosa a cubano en su vivienda tras verlo grabar colas desde su ventana

Policía acosa a cubano en su vivienda tras verlo grabar colas desde su ventana. (Collage: Michel Matos-Facebook)

Un hombre denunció haber sido intimidado por oficiales de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) en su propia casa, luego de que grabara una cola para comprar alimentos desde su ventana en La Habana.

A través de una publicación en Facebook, el usuario Michel Matos expresó haber sufrido del hostigamiento de las autoridades, que subieron hasta su apartamento tras verlo grabar desde el balcón.

El hombre reportó que además de la inmensa y acostumbrada cola para comprar alimentos, los cubanos de la zona estaban enfrentando la falta de electricidad, que había fallado desde la mañana.

Entre esto y la aglomeración, Matos decidió grabar y tomar fotografías desde su ventana de lo que ocurría debajo, sin percatarse de que en uno de los videos incluso se ve a los oficiales “los de verde”, entrando a su edificio, listos para detenerlo por documentar lo sucedido.

“Desde la mañana no hay electricidad. Y aquí visibles están las colas del hambre. Las colas de la desesperación. De la necesidad urgente de llevar algo de comer al hogar familiar”, escribió en su publicación.

Policía acosa a cubano en su vivienda tras verlo grabar colas desde su ventana.(Foto: Michel Matos-Facebook)

Según narra, los agentes intentaron hacerlo salir “para hablar” con él, pero él no aceptó puesto que ya estaban hablando y es cuando ellos lo cuestionaron por tomar video de la cola en la calle.

Policía acosa a cubano en su vivienda tras verlo grabar colas desde su ventana.(Foto: Michel Matos-Facebook)

“Pasaron a pedirme mi identificación. Les pregunté por qué razón (…) Uno de ellos, que parecería el más irritado y molesto ante mi negativa me confronto directamente. ‘¿Tú estabas filmando para allá abajo?’, les respondí que sí, que vi una inmensa multitud y la documenté. ‘¡Tú eres un falta de respeto!’, me espetó con furia que casi vuela su máscara facial”, narró el cubano.

Las fuerzas represivas del régimen siempre intentan silenciar a quienes tratan de documentar las carencias que se viven en Cuba o los abusos de sus autoridades.

Desde quitarles los dispositivos móviles con que toman video o fotografías, hasta detenerlos directamente, la persecución es sufrida principalmente por periodistas y youtubers, pero afecta también a los cubanos de a pie que tratan de denunciar lo que viven día a día.

“Hubo voces altas, más intercambios, se asomaron los vecinos… ‘tú sabes que te podemos cargar por eso, estás filmando y eso es ilegal’, casi literalmente contesté que no existe ley alguna que deje constancia que no puedo filmar, mucho menos desde el balcón de mi propia casa”, señaló Michel.

Indicó que aunque les respondió que sacarlo a la fuerza de su propia casa violaría “todo tipo de leyes nacionales e internacionales” y se mantuvo firme en su postura, estaba asustado y logró filmar solo fragmentos del intercambio pues le sudaban las manos.

En el video se aprecia que hay una reja protectora que separa al cubano de los oficiales y es fácil suponer que de no haber sido porque literalmente necesitaban que les abriera esa reja, se lo hubieran llevado sin importar que estaba dentro de su propia casa.

Ante la “amenaza” del cubano filmando el proceder de los policías, y lo que logró defenderse señalando que era ilegal sacarlo de su domicilio a la fuerza, los oficiales decidieron retirarse, aunque iban hablando por teléfono y aseguraron que regresarían.

“La capacidad de represión absurda está tomando tintes muy peligrosos. Hacen conatos de invasión domiciliar… intimidan (o pretenden hacerlo) en las puertas de un hogar familiar, articulan e interpretan las reglas y las leyes a su propio antojo… creando malestar, indefensión y confusión”, señaló Matos.

Post en el que el cubano contó lo ocurrido. (Captura de pantalla: Michel Matos-Facebook)

Añadió que aún se encontraba a la espera de que los oficiales volvieran con refuerzos y que estaba listo para afrontar las consecuencias de ejercer el mínimo de libertad de expresión que tienen los cubanos en un país cuyas leyes los condena si publican en redes sociales, como es el caso del Decreto-Ley 370.

“He sido súper responsable y cuidadoso con cada medida de la restricción, pero esto, en mi propio hogar, eso sí que no. Antes lo he dicho y lo repito hoy: ‘No tenemos ningún miedo’ (ni los míos ni yo). Aquí estoy listo, si es la cárcel por unas fotos, qué remedio… aquí estoy”, concluyó el cubano.

A pesar de los recursos que el régimen gasta en mantener sus fuerzas represivas, como la Seguridad del Estado y la Policía Nacional Revolucionaria, asegura “no tener” presupuesto para resolver los problemas más urgentes de Cuba como la falta de alimentos y la escasez de vehículos de traslado a hospitales.

Al finalizar la publicación, el cubano aclaró que la cola seguía creciendo y que la luz todavía no regresaba a los hogares.