Presentarán en Cuba política para reconocer la sexualidad como derecho humano fundamental

Dentro del panel que se realizó la mañana de este miércoles en La Habana como parte de la celebración del Día Mundial de la Salud Sexual, especialistas del Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX) de Cuba, arreglan los últimos detalles de una política para reconocer la sexualidad como derecho humano.

La directora de la institución, Mariela Castro Espín, indicó que la propuesta está dirigida a los programas de los diferentes subsistemas de la educación, pues la sexualidad se encuentra presente en todos los espacios de la vida del ser humano.

“La sexualidad no es un vestido que nos ponemos para cada ocasión, es parte de la existencia humana, de nuestro cuerpo, de lo que sentimos, interpretamos, comprendemos, de lo que somos capaces de proponer como proyectos, principios y valores, sin sexualidad no existiríamos, no podríamos reproducirnos”, declaró Castro Espín.

Por esto, la política creada con apoyo de expertos de varias instituciones, como el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y el Ministerio de Educación Superior, incluye programas de acción en los organismos involucrados en la educación sexual y en los derechos.

El jefe del departamento de trabajo comunitario en CENESEX, Gustavo Valdés, explicó que el proyecto ya se encuentra en su etapa final y se discutirá en el consejo de dirección antes de ser llevado a las máximas instancias del país a finales de este año o a principios del próximo.

La política incluiría cuatro programas principales: el primero dirigido a medios de comunicación, buscando utilizar adecuadamente estos espacios informativos y capacitar a su personal; el segundo y tercer aspecto buscaría formar a profesores o futuros educadores para influir en las buenas prácticas de los estudiantes con enfoque de género y derechos humanos.

Los servicios de salud y justicia constituyen la última área de trabajo, una de las más importantes y complejas dada su relevancia para la tarea y la poca actualización con que cuentan en ciertos ámbitos, en especial judiciales.

La política busca que todas las instituciones ofrezcan sus servicios basados en el respeto y la equidad, informando para eliminar tabúes y prejuicios y así lograr una sociedad más socialmente sana.

El aspecto educativo es también muy importante, pues se busca que la población esté informada, desde temprana edad, de cuáles son los riesgos de un ejercicio sexual irresponsable, como embarazos no deseados e infecciones de transmisión sexual, así como todos los aspectos de su sexualidad.

En ese sentido, también pretende combatir los tabúes y la desinformación, para que sepan que no pueden ser discriminados por su género o sexualidad y distingan conductas violentas que han sido normalizadas, como el acoso callejero o cualquier muestra de violencia machista o sexista.

“En el caso de los servicios jurídicos, son vitales porque es el espacio a donde pueden recurrir en caso de maltrato, hacer alguna denuncia, y necesitamos que los operadores del derecho tengan las herramientas para hacer frente a situaciones que pueden estar relacionados con la orientación sexual, le expresión de género, las inequidades o la violencia”, señaló Valdés.

El debate en torno a la nueva política y las varias investigaciones que sirvieron de base para su construcción, tuvo lugar este 4 de septiembre en el marco del Día Mundial de la Salud Sexual, celebrado en el Cenesex con el apoyo de UNFPA.

La fecha está basada en el concepto defendido por la Organización Mundial de la Salud, donde salud sexual se refiere al estado de bienestar físico, mental y social que demanda respeto a la sexualidad y las relaciones, así como la posibilidad de tener experiencias placenteras, seguras, libres de coacción, discriminación y violencia.