Realizan una ceremonia en honor al chofer de UPS fallecido en una balacera en Miami

Con una ceremonia póstuma en el Centro de Clientes de UPS, ubicado al noroeste de Miami-Dade, familiares y amigos se despidieron de Frank Ordoñez, chofer hispano de esta empresa que perdió la vida en una balacera.

En la actividad participaron familiares, amigos y compañeros de trabajo de Ordoñez, quien era padre de dos niñas e hijo adoptivo de un hombre de origen cubano.

El padrastro, Joe Merino, comentó en el homenaje que toda la familia del fallecido seguirá buscando justicia por la muerte.

Frank Ordoñez estaba trabajando cuando fue secuestrado, junto con su unidad, por dos asaltantes de una joyería que utilizaron el vehículo para tratar de huir desde Coral Glabes, pero desencadenaron una persecución.

Al llegar a una vía muy transitada en Miramar el camión no pudo seguir avanzando por lo que se desató una balacera en la que murieron los delincuentes, un conductor de un automóvil particular y el joven hispano.

Los familiares del fallecido acusaron que los oficiales actuaron de manera negligente al disparar sin considerar que los asaltantes tenían a un rehén.

En una entrevista Merino aseguró que su hijo salió del camión gateando y con las manos en alto, pero aun así, indicó, los policías le dispararon en varias ocasiones hasta causarle la muerte.

“No quiero que esto se acabe. No quiero que esto sea barrido debajo de la alfombra, quiero justicia para Frank”, dijo el padrastro ante CBS Miami mientras se levantaba un monumento improvisado en el lugar donde falleció el chofer de UPS.

Los familiares de Frank abrieron una cuenta en la plataforma GoFundMe para reunir fondos que serán destinados para la contratación de un abogado, el costo del funeral y para la educación de sus hijas.

El FBI reportó el pasado viernes que los ladrones abatidos fueron identificados con los nombres de Lamar Alexander y Ronnie Hill, ambos de 41 años.

Según los registros policiales, en el historial criminal de Alexander se dice que fue condenado por robo con arma mortal en 2009 y fue liberado en 2017.

Hill también salió de prisión el mismo año que su compañero, después de cumplir varias condenas por robo.

El automovilista que también falleció en el tiroteo respondía al nombre de Richard Cutshaw, él era residente de Pembroke Pines y en dos años iba a retirarse como representante sindical.

En redes sociales sus conocidos lamentaron la muerte y además dijeron que en vida era un hombre servicial y tranquilo.