Sacerdote yoruba apresado el 11 de Julio presenta un delicado estado de salud

El sacerdote yoruba Loreto Hernández García y su esposa, fueron condenados a siete y ocho años de prisión respectivamente. (Foto-Antúnez Resistencia Placetas-Facebook)

Loreto Hernández García, quien fue apresado durante las jornadas de protestas ocurridas en la Isla el 11 de Julio, es un sacerdote cubano de la religión yoruba que sufre de diabetes e hipertensión, y no está siendo atendido en la cárcel ni contando con los medicamentos que necesita.

Recluido en el penitencial de Guamajal, ubicado en la provincia de Villa Clara, el religioso muestra una delicada situación de salud que requiere de fármacos indispensables para su organismo, debido a las patologías que presenta.

Sin embargo, y según declaraciones de su familia al medio de prensa Radio Televisión Martí, los esbirros del régimen han ignorado lo peligroso que puede ser para su vida, no contar con las medicinas necesarias.

Por si esto fuera poco, la hija de Hernández reveló que también contrajo hepatitis en prisión, por lo que “Muchos de los síntomas que presenta son posteriores a dicha enfermedad”, confirmó.

“Le está dando un dolor; después de la hepatitis se quedó con un dolor que, dice él, que es muy fuerte en la boca del estómago y todas las mañanas amanece con los pies hinchados”, asegura Rosabel Sánchez.

Del mismo modo, agregó que en la última llamada que había mantenido con su padre, este le había confirmado que no le estaban dando los medicamentos para la presión arterial porque la doctora del penitencial le dijo que no había, “que los mandara a pedir, que él tenía posibilidad de que se las mandaran”, explicó Sánchez.

Otras complicaciones que ha presentado el sacerdote yoruba, es que vomita todo lo que ingiere, una posible secuela de la hepatitis mal cuidada y que puede revelar un daño hepático significativo, algo que puede resultar mortal en un diabético.

“Yo se lo he informado al (…) jefe de Orden Interior, al de la Seguridad que lo atiende y no le dicen nada, que eso es normal; no le han hecho pruebas, no le han hecho más análisis”, denunció la joven.

Previamente, el activista cubano había sido internado en el Hospital Provincial Arnaldo Milián, de Villa Clara, debido a la hepatitis contraída. Durante esos días no le permitieron a su familia verlo ni hablar con él, así como tampoco ofrecían datos sobre su evolución.

Loreto Hernández García, quien además es el vicepresidente de la “Asociación Yorubas Libres de Cuba”, cumple una condena de siete años de cárcel debido a su participación en las protestas que levantaron a Cuba durante las jornadas del 11 de julio de 2021, más específicamente las ocurridas en Placetas, Villa Clara.

Su esposa, la activista Donaida Pérez Paseiro, también fue condenada a ocho años de prisión por el mismo motivo.