“Servicial y dedicado a sus pacientes”: así describen al médico cubano fallecido en París

Juan Manuel Obana Borges, médico cubano expulsado de una misión en Mauritania y quien falleciera bajo “extrañas circunstancias” en el aeropuerto de París, fue descrito por conocidos como “un hombre enamorado de su profesión, sincero, servicial y dedicado a sus pacientes”. 

De acuerdo con Diario de Cuba, el galeno comenzó su carrera universitaria en 1990 y terminó su primera especialidad, medicina interna, nueve años después y la segunda, medicina intensiva y atención grave, en 2001. 

Entre 1996 y 2015 trabajó en el hospital de Baracoa, para luego ser trasladado hasta Maisí. Durante su estadía en este último centro preparó al personal de Terapia Intensiva. Incluso, formó parte de la Brigada Médica Cubana en Zimbabwe. 

“Estaba enamorado de su profesión, ayudaba a todo el que lo buscaba”, aseguró una fuente, quien prefirió permanecer en el anonimato. 

Tras su muerte, Obana Borges, de 47 años, ha dejado atrás un viuda y un hijo de un anterior matrimonio. El doctor se distinguía por su amor a la música de Vicente Fernández y José José, sus chistes y su apreciación por los documentales Discovery. 

“Odiaba la mentira y la guataquería”, subrayó la fuente.“Era de ideas rápidas y decía siempre lo que pensaba. Creía en Dios y en la Virgen de la Caridad”. 

Muerte y teorías posteriores

El especialista, natural de Baracoa, Guantánamo, había estado trabajando en un hospital de Nuakchot, capital del país africano. Al parecer, días antes de su exclusión, tuvo “desavenencias” con el director del centro por causa del tratamiento aplicado a una embarazada con un tromboembolismo pulmonar.

A raíz de este incidente, la jefa de la Brigada Médica Cubana en Mauritania, con la cual el galeno también tuvo conflictos, notificó la expulsión inmediata de Obana Borges y “lo montaron en un avión con destino a Francia”.

En el aeropuerto de París el doctor sufrió un primer infarto, por lo cual perdió el avión con destino a Cuba. Todo indica que fue sorprendido por una segunda necrosis isquémica, la cual resultó mortal. 

Lamentablemente, ante la falta de información sobre las circunstancias que rodean su muerte, disímiles teorías han surgido entre allegados. Algunas versiones indican que el galeno había solicitado asilo político en Francia. 

“Amigos comunes me cuentan que él contactó con alguien para desertar en el aeropuerto, tenía personas afuera que lo iban a ayudar”, relató Emerson Moreno, excompañero de estudios de la víctima. 

Casos similares

El fallecimiento de Obana Borges se una a la -cada vez más- larga lista de trabajadores cubanos del área de la salud que han perdido su vida mientras desempeñaban funciones en otros países. 

A finales de agosto se dió a conocer la muerte de Odalys Barrios Diego, miembro de la Brigada Médica en San Ignacio, Belice, quien también falleció “inesperadamente”. Un mes antes, se notificó sobre la desaparición física de Reyner Estrada Batchelor, de 34 años, un inmunólogo en Ecuador.