Unos 34 niños están albergados en locales de una antigua Fábrica de Calderas de La Habana

Unos 16 núcleos familiares, dentro de los que se encuentran 34 niños, fueron albergados por el gobierno de La Habana en oficinas de la antigua Fábrica de Calderas de Vapor del municipio Diez de Octubre, tras el paso del devastador tornado a finales de enero.

Según recogió la agencia estatal ACN, el inmueble todavía no cumple con las condiciones infraestructurales adecuadas para acomodar a las familias, pero estas han recibido “toda la atención sanitaria, alimenticia, material y de seguridad posibles”.

Bárbara Correoso Dacosta, directora de Albergues en ese municipio, explicó a la agencia que allí se encuentran un total de 78 personas, quienes vivían en edificaciones que quedaron reducidas a derrumbes totales por el fenómeno meteorológico.

En fotos divulgadas por dicho medio se pueden ver que las familias cohabitan con otras en espacios muy reducidos y duermen sobre literas de hierro que, en algunos casos, no cuentan con los colchones apropiados.

El Albergue Caldera, como así lo conocen, carece de elementos básicos que garanticen la comodidad de las familias tales como puertas, duchas, pintura, arreglo de paredes e iluminación, para lo cual se prevé la colocación de unas 15 lámparas.

No obstante, la cooperativa no estatal encargada de las labores de reestructuración y remozamiento del edificio, informó que para la semana próxima todo podría estar listo para que “los distintos núcleos familiares tengan una confortable estancia”.

Reynaldo Hernández Fernández, jefe del Centro de Producción Industrial en la Cooperativa no agropecuaria Construcciones Santa Fe, explicó que su brigada está trabajando desde el 28 de enero, un día después del desastre, en dichas labores.

Indicó que esas otroras oficinas de la Fábrica de Calderas datan de los años 60 del pasado siglo y se erigieron con arena de mar, por lo que el salitre comenzó a reventar el acero y ahora es necesario retocarlo completamente con nuevos materiales.

De acuerdo con la publicación, la Cooperativa paralizó por semanas la fabricación de losas de granito y colocó sus 16 trabajadores a disposición de lo que hiciera falta en la obra.

Hernández Fernández destacó que todo el material que se empleó y empleará en el acondicionamiento del local es totalmente asumido por esa Cooperativa no agropecuaria, sin cobrar un centavo; y ya suman alrededor de 38 mil pesos invertidos (1.600 dólares).

El tornado que azotó la capital el pasado 27 de enero en la noche dejó un saldo de siete muertos, 195 heridos y casi 8.000 afectaciones en la vivienda, dentro de las que se incluyen mas de 700 derrumbes totales. A causa de esta situación, casi 10 mil personas se vieron obligadas a albergarse en casas de amigos o familiares, así como en locales del Estado.