Agricultores cubanos prefieren dar otro uso a sus cosechas que venderlas al Estado con precios topados

Ante el desabastecimiento provocado por la implementación de precios topados, agricultores privados cubanos ven como mejor opción dar otro uso a las cosechas que venderlas al Estado con los precios exigidos por la autoridad.

“Utilizamos muchos insumos para producir algún tipo de alimento, y con el precio topado del gobierno no es rentable la producción agropecuaria”, comentó el campesino Emiliano González en entrevista con Radio Televisión Martí.

Para este agricultor, oriundo de Bayamo, en Granma, la política de precios topados es una medida coercitiva que solo generará más desabastecimiento de alimentos en todo el territorio de la Isla, por tal motivo, él prefiere guardar su producción o utilizarla para alimentar a animales.

El medio independiente también entrevistó al agricultor Ibar González de Villa Clara, quien comentó que el gobierno no tomó en cuenta el costo de la producción cuando se ordenó el tope de precios y mucho menos consideró los diferentes problemas que presenta la empresa estatal Acopio.

“Se pudrió el plátano fruta y la calabaza, porque Acopio no vino a recoger los productos, la culpa la tiene el Estado, la tiene el gobierno, los que tienen el 70% de las tierras de este país, y la tienen improductiva”, aseguró el agricultor que labora en la comunidad de Quemado de Güines.

Asimismo, agregó que el maíz no se ve en los mercados porque los campesinos privados ganan más cuando se lo venden a criadores de aves que al régimen.

“El maíz está perdido del mercado porque el campesino prefiere vendérselo a los galleros o a los palomeros, porque se lo pagan a 500 pesos; el Estado lo paga a 220, un precio topado que afecta al campesino”, manifestó.

A las quejas de la falta de planeación del gobierno, también se suma la voz del tabacalero Rolando Pupo, quien es vecino de San Juan y Martínez; para él los precios topados deben basarse en la ley de oferta y demanda para que sean razonables y justos.

“El campesino no se siente incentivado a producir porque los insumos que entran a la agricultura llegan por el mercado negro a altos precios, entonces el campesino tiene que invertir muchos recursos para al final poder producir algo de alimentos y venderlo a un precio que él se sienta beneficiado. Esto el régimen no lo entiende”, manifestó Pupo.

Aunque persista la queja de los productores privados, todo parece indicar que el gobierno no se echará para atrás en el tema de los precios topados y mantendrá está medida por largo tiempo y aplicando “mano dura” a quienes no la respeten, según comentó la ministra de Finanzas y Precios de Cuba, Meisi Bolaños.

“Vamos a ser rigurosos con aquellos que intenten, mediante artificios, evadir y violar las nuevas medidas aprobadas para evitar el incremento de los precios”, explicó Bolaños en una entrevista con el medio oficialista Cubadebate.

Con Información de Radio Televisión Martí