Cuba entrega viviendas, pero con prioridad para los simpatizantes del gobierno

La vivienda en Cuba es un tema que no se resuelve ni siquiera con la Revolución. Fidel Castro, cuando todavía era un opositor del gobierno de su época y no había comenzado la guerra, ponía el tema de la vivienda como un objetivo principal para el gobierno que quería instaurar. Más de medio siglo después, Cuba sigue teniendo un déficit inmenso en cuanto a viviendas.

Con una economía pobre y atrasada envuelta en deudas y poco desarrollo el plan del gobierno para construir viviendas este año, solo se ha cumplido al 8% de lo planificado. Un mal augurio. Pero el régimen no favorece a los más necesitados o los jóvenes que tanto necesitan. Son los militares y personajes adeptos al gobierno cubano los primeros en recibir una casa.

No importa cuál sea la situación de miles de cubanos o la urgencia por tener un techo. No importa si eres un pequeño productor privado o profesional tratando de subsistir, debes esperar, pues alguna figura política de barrio o del municipio, o algún militar que quizás no ha aportado tanto como tú al país recibirá la casa primero.

Según el economista y Doctor en Ciencias Ángel Marcelo Rodríguez Pita, las viviendas que entrega el Ministerio de la Construcción (Micons) no siempre favorecen a los más vulnerables. «La mayoría de los que reciben esas viviendas son militares o personas que se encuentran involucradas con el régimen de La Habana», dijo a Martí Noticias.

La prioridad la tienen los “amigos”, signo una vez más de la corrupción o de la política del gobierno de ayudar a quien te apoya. Además, la inversión principal de la construcción está en el turismo y no en la población.

“Esto ya estaba antepuesto en los lineamientos de la política económica y social del partido, en la actualización de ese modelo y la nueva Constitución. En todos estos documentos el partido comunista de Cuba esclareció que va a ver una disminución de los fondos destinados a programas sociales” comentó Pita.

En la clausura de la reunión realizada por el Consejo de Ministros el pasado 31 de marzo sobre el delicado tema de la vivienda en Cuba, Miguel Díaz Canel dijo que, por día, cada municipio del país tiene la capacidad de producir los materiales de construcción necesarios para la construcción de una vivienda.

El análisis del plan de terminación de viviendas ha sido constante en las reuniones que, para examinar su avance, realiza cada mes el presidente de los Consejos de Estado y de Ministros. El presidente cubano consideró que se debe dar fin a las trabas y mecanismos burocráticos que propician malestar en la población e impiden legalizar las viviendas una vez culminadas.

Muy tenso ha sido el abasto de cemento, en especial a la zona oriental, desde que inició el presente año. En el caso del alambrón con destino al programa de la vivienda, el ministro de la Construcción declaró que se evalúan las diferentes alternativas que permitan suplir su déficit. Refirió la posibilidad de edificaciones con menor cantidad de niveles que permitan usar otro tipo de acero en la construcción.

El programa de la vivienda es uno de los programas con mayor impacto social de la isla y no solo la rapidez con que se cumple sino la forma igualitaria y justa de cómo se reparten estas viviendas podrá mejorar la situación y la conformidad de la población cubana.