El régimen sostiene con desespero que el 15N sigue “libreto yanqui”

Más cubanos se suman a la marcha convocada por Archipiélago. (Foto ilustrativa: Marcos Evora-Facebook)

El régimen sigue preocupado por la fuerza que la Marcha Cívica por el Cambio continúa tomando en el país, a pesar de sus amenazas y acoso a promotores. Las autoridades repiten sin cesar el viejo guion de que los deseos de libertad de los cubanos no son auténticos, sino que responden a un “libreto yanqui”.

Rogelio Polanco Fuentes, jefe de su Departamento Ideológico del Comité Central del Partido, ofreció una conferencia de prensa donde ratificó el rechazo de la dictadura a quienes se oponen a su decadente sistema.

Siguiendo la línea oficialista aseguró que solo deseaba marchar “un reducido grupo”, lo cual contradice la convocatoria lograda por Archipiélago en todo el país. Aseguró que esos jóvenes estaban financiados por Estados Unidos, como si fuera imposible que los cubanos rechazaran el castrismo y no pudiesen cansarse de 62 años de escasez, violaciones de derecho, represión y “hablar bajito”.

“El gobierno estadounidense es el verdadero organizador de la provocación montada para noviembre”, insistió y ofreció los mismos argumentos de siempre, los que excluyen según ideologías y en qué orilla se viva.

“Estados Unidos amenazó con nuevas medidas contra Cuba si no se permite que sus operadores locales actúen impunemente. Cuba no acepta amenazas, ni se deja intimidar, nuestra historia de resistencia y dignidad lo confirma. Guárdense sus amenazas, que el miedo no come aquí”, dijo.

Los promotores de la pretendida marcha siguen el libreto yanqui, cumplen sus órdenes, se rodean de violentos y terroristas y sueñan ejecutar sus acciones desestabilizadoras con impunidad.#LaRazónEsNuestroEscudohttps://t.co/k1bUAJW3qB pic.twitter.com/eiIBdemP5I

— Rogelio Polanco Fuentes (@RPolancoF) October 27, 2021

Sin embargo, los hechos demuestran lo contrario; la dictadura se muere de miedo y se nota en sus desesperadas acciones. Primero estableció el Día Nacional de la Defensa para el 20 de noviembre (fecha inicial de la marcha), luego actividades por el 502 aniversario de La Habana, retrasó el inicio del curso escolar, puso vigilancia a promotores de las protestas, expulsó a varios de ellos de sus puestos de trabajo y colgó palomas muertas en la puerta de Yunior García.

Antes de cerrar su discurso, Polanco aseguró que “la provocación para el 15 de noviembre” estaba condenada al fracaso porque “nunca fue auténtica. Su intento de arroparse con alguna legalidad es una manipulación perversa. Los promotores siguen el libreto yanqui, cumplen sus órdenes y se rodean de violentos y terroristas; y sueñan con ejecutar sus acciones con impunidad”.

El régimen ha dejado claro que no quedará de brazos cruzados frente a la Marcha Cívica por el Cambio. El presidente Miguel Díaz-Canel ya dio la orden de combate contra los manifestantes y sacó a sus “revolucionarios” a las calles con palos y armas en señal de amenaza.