Empresas estatales de Cuba no tienen asegurado el combustible para 2021

La economía comunista otorga todas las materias primas de forma centralizada para que las empresas estatales puedan trabajar, algo que se planifica cada fin de año con vista a los próximos 12 meses. Pero en el año 2021 y, según el ministro de economía Alejandro Gil Fernández, no está asegurado un rubro tan importante como el combustible.

“No hay quien pueda desde hoy decir cuánto combustible daremos a las entidades el próximo año. Dependerá de la disponibilidad que exista en el país y de las divisas”, expresó Gil Fernández durante la presentación de las proyecciones económicas de Cuba en el sexto período ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular.

Empresas estatales no tiene asegurado el combustible para 2021. (Foto: Periódico Cubano)

Según el presupuesto del Estado el 20% del total de egresos está destinado a la compra de combustible, pero la disponibilidad de divisas es un tema clave a la hora de salir al mercado internacional a comprar portadores energéticos sobre todo en tiempos donde el suministro de petróleo desde Venezuela a caído a mínimos históricos desde la llegada al poder de gobiernos chavistas en el año 2000.

Con todas las dificultades e incertidumbre para el sector empresarial cubano, que acapara más del 85% de la fuerza laboral y al cual el gobierno privilegia sobre el sector privado, Gil Fernández cree que se debe producir más.

Se necesita una mayor participación de la industria nacional y del sistema empresarial como proveedor de la red de comercialización minorista y mayorista en MLC (30% de ese mercado).

El gobierno cubano apuesta por esta modalidad de ventas en dólares sostenida por la comunidad cubana en el exilio como una de sus pocas vías para generar ingresos en divisas internacionales.

Incluso en el presupuesto para 2021 hay planificado un incremento del 20% en los ingresos en dólares sobre todo provenientes del sector de las telecomunicaciones.

“Actualmente producimos en el país en el entorno del 12% y es muy bajo. La industria nacional debe funcionar como proveedor. El principal incentivo es que quien venda a ese mercado retiene el ciento por ciento de las divisas, como parte de la descentralización y la autonomía que se le está otorgando al sector empresarial”, refirió el ministro.

Ahora el gobierno dio “libertades” a sus propias empresas estatales para que inicien la venta de sus bienes y servicios en dólares, tal como ha venido corriendo con la venta de arroz por parte de la empresa arrocera Sur del Jíbaro.

Todo ello constituye una franca violación del propio compromiso del gobierno de poner en esos mercados en dólares los productos de lujo y electrodomésticos de mayor valor, dejando fuera a los artículos de primera necesidad.

En la actualidad todo lo poco que hay de alimentos y servicios básicos en la Isla está migrando a la comercialización en dólares bajo la modalidad de pago por tarjeta magnética con el objetivo de recaudar toda la divisa que envía el exilio cubano como remesa.