En manos del gobierno, SNet perdió la calidad que tenía cuando era red privada

Tras las resoluciones emitidas por el Gobierno cubano para que SNet, usuarios de esta red inalámbrica, que en su mejor momento fue privada, denuncian que las autoridades la están desmantelando debido a su falta de funcionamiento.

SNet apareció en el territorio cubano en 2001 conectando a miles de personas en La Habana y otras ciudades a través del enlace de redes de wifi. Con ello, además de ser una herramienta de comunicación vía chat, los usuarios también podían acceder a videos y juegos.

Sin embargo, el gobierno cubano recientemente emitió medidas para considerar este sistema ilegal y se apropió de él, provocando que más de 40 mil usuarios pierden una conexión veloz y amplio alcance.

Radio Televisión Martí entrevistó a administradores que tenían redes en SNet y tuvieron que pasarse al sistema Joven Club, bajo el control del gobierno, el cual, aseguran, tienen un pésimo funcionamiento.

“Yo sabía que no íbamos a poder contar nunca con los servidores y nunca íbamos a poder lograr las conexiones; es más de lo mismo”, comentó Orlando García, que administraba una red privada desde Artemisa.

García aseguró que el gobierno cubano no tienen interés en que existen personas capacitadas para controlar el funcionamiento de los servidores estatales para establecer buenas conexiones.

El usuario mencionó que respalda la idea de que las autoridades están desmantelando dicho sistema porque a los cuatro días de tenerlo bajo su control se cayó un servidor de chateo y nunca se volvió a activar.

Alberto Páez, un administrador de SNet en Mayabeque, lamentó que el gobierno se haya adueñado de este sistema sin tener recursos ni gente preparada para su operación.

En un intento por imitar el servicio de SNet, los Joven Club ofrecen un servicio llamado La Mochila que supuestamente sirve para chatear y jugar, pero los usuarios aseguran que solo es un engaño.

“Todo ha sido un engaño. Hay muchos que están conectados y están disfrutando de algo que hicieron la gente de la SNet, pero no está funcionando bien. Funciona unos días, se cae, y hay miles que estamos desconectados”, comentó Páez.

Después de que el gobierno puso en marcha dichas resoluciones, usuarios de SNet salieron a protestar y se les aplicó lo mismo que ocurren con activistas opositores, agentes de la seguridad del Estado empezaron acosarlos y amenazarlos con cárcel.

Ernesto de Armas, un joven que estaba en las protestas, denunció que agentes llegaron a su casa y se lo llevaron detenido para amenazarlo con un arresto prologando y la acusación de falsos delitos si continuaba con su activismo.