Familias llevan 11 años a la espera de que derriben parte de un edificio que pone en peligro sus hogares

Familias llevan 11 años a la espera de que derriben parte de un edificio que pone en peligro sus hogares. (Foto ilustrativa de una vivienda en mal estado: Periódico Cubano)

Cuatro familias de La Habana han esperado 11 años por la llegada de una brigada para demoler el tercer y último piso del edificio en el que viven, el cual pone en peligro sus viviendas y sus vidas.

De acuerdo con el medio independiente Diario de Cuba, la condición del edificio, ubicado en la calle San José 860 entre Oquendo y Soledad, ha sido denunciada ante las autoridades durante años, pero estas solo han dado posposiciones y evasivas.

“El último derrumbe parcial ocurrió el 29 de julio cerca de las 6:00 de la mañana y todos los escombros cayeron en mi patio. Hemos escrito cartas a todos los niveles y nada, nos dijeron que no tienen recursos para demoler esa parte del edificio, y que solo si hay algún lesionado o muerto podían atender esta situación, lo que consideramos una falta de respeto”, declaró Thailín Kindelán Portuondo al citado medio.

El reportero independiente Waldo Fernández Cuenca comprobó que varias secciones de las viviendas están totalmente apuntaladas, presentando cuarteaduras y humedad en las paredes.

La vecina del segundo piso, identificada como Idalmis Díaz Escalona, aseguró que no puede utilizar la mitad de su vivienda, pues los últimos pisos se encuentran completamente apuntalados y se mojan por completo cuando llueve.

“En todos estos años, cada vez que llamamos para ver cuándo vienen a demoler siempre tienen una justificación: que si no hay esto, que si no tienen aquello… nos han dicho que tienen una sola grúa de demolición para toda La Habana. Ya es una burla en nuestras caras”, declaró.

Es necesario mencionar que otro edificio ubicado en el mismo municipio sufrió un derrumbe parcial el pasado 8 de julio, por lo que más de 20 familias que habitaban en su interior tuvieron que abandonar sus viviendas por casi dos días en lo que arribaba la brigada para recoger los escombros y examinar los daños.

En aquella ocasión, el medio oficialista Cubadebate aseguró que un alero del inmueble se precipitó a la vía pública durante la noche, por lo que no se reportaron lesionados.

El problema que sufren las cuatro familias que habitan el edificio habanero se ha vuelto uno muy común en la Isla, pues el paso de los años y la escasez de materiales de construcción impiden que estas estructuras puedan recibir el mantenimiento necesario, lo que provoca derrumbes totales o parciales, los cuales han llegado a costarle la vida a sus habitantes.

De igual manera, muchos de estos problemas son reportados a tiempo a las autoridades, pero suelen pasar años antes de que estas hagan algo al respecto.