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Gobierno cubano manda a trabajo correccional a cinco jóvenes detenidos por las protestas masivas
Los adolescentes habían recibido sentencias de cárcel por motivo del estallido social
El gobierno cubano cambió la medida cautelar de cinco jóvenes que recibieron sentencias entre 7 y 9 años de privación de la libertad por motivo de las protestas masivas del pasado 11 de julio, informó Radio Televisión Martí.
Marlon Brando Díaz Oliva, Emy Yoslán Román, Marcos Antonio Alfonso Breto, Frank Daniel Roy Sotolongo y Yensy Jorge Machado González, residentes de La Güinera, provincia de La Habana, ahora tendrán que cumplir con cinco años de trabajo correccional con internamiento.
«Les dieron la libertad, pero no por completo, estamos esperando que los llamen para saber el campamento donde los mandarán», confirmó Emilio Román Matos, padre de Emy Yoslán, a la emisora.
El progenitor agregó que se encuentra contento, pero no del todo, porque sus otros dos hijos, Osney Emilio Román y Mackyani Yosney Román, siguen detenidos y cumpliendo una pena de 12 años de cárcel.
El cambio de medida para estos jóvenes ocurre un día después de que el Comité Contra la Tortura de las Naciones Unidas determinara que el gobierno cubano viola lo establecido en la Convención contra la Tortura y otros Tratos Crueles, Inhumanos y Degradantes.
Al ofrecer sus observaciones finales, tras un informe presentado por régimen castrista, Sébastien Touzé, vicepresidente del comité, hizo énfasis en el arresto de más de 50 menores durante y después del estallido social no visto en más de 60 años en la Isla.
El experto independiente también denunció que los agentes de la Policía Nacional Revolucionaria y seguridad del Estado “encarcelan con frecuencia a los activistas para impedirles participar en manifestaciones públicas o reuniones privadas para ejercer sus derechos a la libertad de expresión, asociación, reunión o circulación”.
A finales de abril, el gobierno cubano cambió la medida cautelar de cinco menores que estaban encarcelados por motivo de las manifestaciones.
Samuel Torres, Yeray M. Palacios, Ernesto A. Martínez, Ayan I. Jover y Keyla R. Mulet regresaron a sus hogares, pero bajo la medida de arresto domiciliario.
Esto ocurrió tras la presentación de una denuncia sobre 36 casos de abuso y encarcelamiento hacia menores cubanos ante el Comité de los Derechos del Niño de la Organización de las Naciones Unidas.
La querella fue emitida por Prisoners Defenders, organización que ha informado acerca de la presencia de más de mil presos políticos en las cárceles de la Isla, la mayoría relacionados con las protestas masivas.
Estos convictos recibieron sentencias por los supuestos delitos de «sedición», “desórdenes públicos”, “atentado”, “daños”, “desacato” y “propagación de epidemia”.
