Joven detenido por participar en las protestas del 11J aún no tiene fecha para un juicio

Eloy Bárbaro es uno de los jóvenes arrestados por formar parte de la manifestación del 11J. (Foto: Marcel Valdés – Facebook)

El activista Marcel Valdés compartió en las redes sociales el caso del cubano Eloy Bárbaro Cardoso, de 18 años, uno de los jóvenes detenidos por participar en el estallido social contra la continuidad del castrismo ocurrido el 11 de julio.

Valdés comentó en Facebook que el joven oriundo de Arroyo Naranjo, en la provincia de La Habana, enfrenta los cargos de “desorden público” y “atentando”, pese a que su intervención en las protestas fue de manera pacífica.

“Totalmente descabellado ya que Eloy solo se expresó pacíficamente y eso es un derecho humano”, opinó el opositor.

Bárbaro Cardoso se encuentra en la prisión “Jóvenes de Occidente” y aún no tiene programado un juicio.

“Solo le dicen a la madre que su situación es complicada, ella está desesperada pidiendo justicia y libertad para su hijo”, concluyó el activista.

Cubalex, organización sin fines de lucro que defiende los derechos humanos en la Isla, compartió en su último reporte acerca del 11J que al menos 15 de los 563 arrestados por el estallido social tienen 18 años o son menores de edad.

Los detenidos enfrentan cargos como “propagación de epidemia”, “daños”, “desacato”, “atentado”, “desorden público”, entre otros delitos que comúnmente aplica el régimen contra opositores sin presentar pruebas reales.

El pasado lunes, el cubano Armando Jesús Sardiñas Figueroa, de 20 años, recibió una sentencia de 10 meses de trabajo correccional con internamiento por su participación en las protestas masivas del 11J.

El régimen lo acusó del delito de “desorden público” y cumplirá su condena en el campamento La Lima, en Guanabacoa.

Sardiñas Figueroa fue víctima de un juicio sumario realizado en el Tribunal Municipal de Diez de Octubre, en La Habana, donde no se presentaron pruebas, ni tuvo derecho a una defensa.

Lo anterior es parte de un proceso conocido como “atestado directo”. Prisoners Defenders (PD) denunció en un informe que el gobierno cubano empezó a aplicar este sistema para agilizar los juicios contra los manifestantes.

Además de priorizar el juicio sumario y no permitir una defensa efectiva, los testigos son policías y todo el proceso está a cargo de la Seguridad del Estado.

“El objetivo es constituir un método y una vía ágil y expedita, de dar curso legal a los asuntos que se tramitan dentro del procedimiento sumario en los tribunales municipales, es el proceso sumario elevado a la inmediatez y las carestías de defensa efectiva y debido al proceso a la enésima potencia”, dice el informe de PD.