NOTICIAS DE CUBA
Las recetas que propone Cubadebate: Dulces y guisados a base de sangre
El portal calificó como una “tradición culinaria” la cocina con sangre
Nuevamente, la prensa estatal cubana sugiere al público recetas para adaptarse a la aguda escasez de alimentos por la que atraviesa el país en medio de la pandemia del coronavirus. Esta vez con otra sobra de los cerdos y reses cuya carne nunca llega a las mesas de los cubanos.
A solo unos meses de que el ministro de la Industria Alimentaria, Manuel Santiago Sobrino Martínez, informara que se alimentaría al pueblo con tripas, ahora el portal Cubadebate propone recetas para cocinar sangre en diferentes presentaciones.
Con el título “Sabor y Tradición: Cuatro recetas que incluyen sangre en su elaboración”, la web calificó como una “tradición culinaria” la cocina con sangre, argumentando que no solo se ve en España, sino también en otros países del mundo.
“Considero que el Caribe tiene su propia cultura y cocina, dada por esa mezcla, por ese ajiaco del que tanto habló Fernando Ortiz, teniendo en cuenta ese intercambio entre las islas y la tierra firme, además del paso que era Cuba para los demás países de centro y sur américa”, señala el texto firmado por la ingeniera agrónoma Silvia Mayra Gómez Fariñas.
Aunque es cierto que las recetas a base de sangre son comunes y populares en Latinoamérica, como es el caso de la morcilla, lo que indigna a los cubanos -al igual que con las tripas- es el hecho de que la carne de los animales, parte más cotizada y comestible, no se pone a disposición del pueblo.
“Si no la puede hacer, al menos que le sirva de conocimiento para saber de nuestras costumbres y cultura. Mi intención es darle, junto con las recetas, parte de nuestra cultura y nunca faltarle el respeto a los lectores”, agregó la autora, anticipándose a las acostumbradas críticas que generan este tipo de artículos.
La prensa oficialista se ha hecho célebre por proponer a la ciudadanía recetas con los ingredientes que puedan conseguir, como tripas, clarias o yogurt de soya, que promocionan como si fueran grandes manjares.
También se ha colocado en el polo opuesto, recomendando recetas imposibles, con ingredientes que no existen en Cuba o criticando los hábitos de los cubanos como si fueran opcionales, recomendándoles gastar menos en internet y más en comida.