MUNDO
¿Quién cuidará a la bebé nacida entre los escombros? Miles de personas quieren adoptarla
Ante la muerte de los padres y hermanos de la bebé sobreviviente nombrada Aya, miles de personas han pedido ser sus padres adoptivos.
La bebé milagro nacida entre los escombros del terremoto fue nombrada Aya, que en árabe significa “una señal de Dios”. Collage: (Capturas de pantalla).
La bebé siria nacida bajo los escombros de su edificio y encontrada después de 10 horas conectada a su mamá por el cordón umbilical, fue la única sobreviviente de su familia por el terremoto ocurrido el pasado lunes en el sudeste de Turquía y el noroeste de Siria que ha causado ya más de 28 mil muertos y 85 mil heridos.
Los rescatistas en la ciudad de Jindayris descubrieron a la bebé mientras excavaban buscando personas con vida entre las ruinas de la vivienda donde vivían sus padres y sus cuatro hermanos, quienes no sobrevivieron. Casi una semana después, la pequeña se encuentra estable y se recupera de contusiones y hematomas en el Hostpial Cihan de Afrin, el pueblo cercano a donde fue trasladada.
Foto: (Captura de pantalla).
Los médicos le buscaron un nombre para “dejar de llamarla recién nacida”, según contó el doctor Hani Maarouf, así que decidieron bautizarla como Aya, que en árabe significa “una señal de Dios”.
Las imágenes de su rescate le han dado la vuelta al mundo, que ha estado en los últimos días expectante ante la recuperación de la “bebé milagro”. Ante la muerte de sus padres y familiares más cercanos miles de personas se han ofrecido a adoptarla, haciendo sus peticiones a través de las redes sociales, en los medios de comunicación y mediante llamadas al hospital donde permanece ingresada.
El director del centro, Khalid Attiah, contó al medio BBC que ha recibido decenas de solicitudes de personas de todo el mundo que quieren adoptar a la bebé Aya. Por ahora, la esposa del director conocida como la doctora Attiah, madre de otra bebé de cuatro meses, le está dando de lactar a la pequeña huérfana y ya advirtió que “no dejará que nadie la adopte hasta que aparezca su familia lejana”.
Jindayris, la ciudad natal de Aya, ha sido destruida en un 90 por ciento pero las personas continúan buscando a sus seres queridos entre los edificios derrumbados.
La agencia Associated Press informó recientemente que ya fue localizado un tío abuelo de la pequeña, Salah al-Badran, que se hará cargo de Aya cuando sea dada de alta del hospital. Salah, quien es tío de su padre, pudo huir de su vivienda antes del derrumbe y salvar a 11 familiares que se encuentran viviendo en una casa de campaña.
Aya, uno de los incontables niños huérfanos que dejó el fatal terremoto del 6 de febrero, vivirá con esta familia lejana que le ha quedado, cuando encuentren también un nuevo sitio para quedarse, pues como dijo Salah, “después del terremoto, nadie podrá vivir en su casa o edificio. Sólo el 10 por ciento de los edificios aquí son seguros para vivir, y el resto quedó inhabitable”.
