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Economista Pedro Monreal explica por qué fallan los topes de precios en Cuba
Las políticas económicas y monetarias del régimen cubano provocan desabastecimiento de comida e inflación
El economista cubano Pedro Monreal critica la ineficacia de los topes de precios impuestos por el gobierno comunista como respuesta a la crisis de seguridad alimentaria que atraviesa la Isla, donde la escasez y la inflación, agravada desde la entrada en vigor del “ordenamiento económico”, están a la orden del día.
Según Monreal, estos topes son políticamente “convenientes”, permitiendo al Estado adoptar un rol protector mientras culpa a actores no estatales por la escasez. A pesar de su prevalencia en la narrativa oficial, los topes han demostrado ser ineficaces para estimular la oferta, especialmente desde que fueron retomados con más fuerza durante la pandemia.
3/10 Con anterioridad al inicio de la pandemia, ya quedaba claro que los topes de precios funcionaban como un mecanismo administrativo con capacidad limitada para regular el mercado. La pandemia acentuó la utilización de topes, pero sin impacto en una mayor oferta pic.twitter.com/qsGjE2VHXl
— Pedro Monreal (@pmmonreal) November 15, 2023
El catedrático recuerda que previo a la llegada de la emergencia sanitaria por el coronavirus, ya era evidente que los topes de precios tenían un impacto limitado. La situación empeoró con la llamada “inflación de diseño” del “ordenamiento” que entró en vigor en enero de 2021. Este esquema, agravado por factores circunstanciales y geopolíticos, ha llevado a un aumento significativo en los precios de los alimentos, exacerbando la escasez existente.
Monreal identifica dos vías para abordar el déficit alimentario: importaciones y producción interna. Sin embargo, la capacidad del gobierno para importar alimentos en la escala requerida está limitada por la falta de divisas. En varias ocasiones, los comunistas han dicho que no hay dinero en las arcas públicas, entre otros factores, por el declive en los ingresos del turismo y la venta de servicios médicos y profesionales.
En el plano interno, hay una profunda crisis en la agricultura que no ha sido resuelta por el enfoque productivo inefectivo del Estado, que crea más burocracia como el famoso plan con “63 medidas” y otras iniciativas. Todo ha resultado en un fracaso absoluto. Una prueba del desastre mayúsculo es que los campesinos cubanos no están entregando la leche a la industria estatal, pues el precio de compra es irrisorio. A los productores ganaderos, que están sometidos a una ola de violencia contra el ganado mayor en los campos, le es más rentable hacer producciones locales como queso y yogur.
4/10 El fiasco de la llamada “inflación de diseño” del “ordenamiento” -complementada con factores circunstanciales y geopolíticos- se tradujo en una notable multiplicación del precio de los alimentos que hace parecer “próspera” la escasez de pre-pandemia y pre-“ordenamiento” pic.twitter.com/v4tqhkHTC2
— Pedro Monreal (@pmmonreal) November 15, 2023
Mientras tanto, el gobierno intenta contener el costo en divisas de importaciones mediante ajustes en la canasta básica y la implicación de MIPYMES. Además, se ha expandido un mercado interno dolarizado con entidades “privadas” de conexión imprecisa con la propiedad estatal, lo que ha generado más interrogantes que respuestas, destaca el economista.
La solución a largo plazo, de acuerdo con Monreal, radica en la producción interna, mayormente a cargo del sector privado. Esto requeriría una transformación estructural de la pequeña producción mercantil hacia una producción capitalista, una opción que políticamente no ha encontrado tracción.