NOTICIAS DE CUBA
Human Rights Watch lamenta que el castrismo imponga sus caprichos ante las marchas pacíficas
“Protestar es un derecho que no puede estar sujeto a los caprichos de un gobierno”
Human Rights Watch lamentó que el gobierno cubano imponga sus caprichos para calificar como ilícita la “Marcha Cívica por el Cambio” que se realizará el próximo 15 de noviembre en varias ciudades del país.
“Protestar es un derecho que no puede estar sujeto a los caprichos de un gobierno”, expresó en Twitter José Miguel Vivanco, director ejecutivo para las Américas de dicha organización defensora de los derechos humanos.
Vivanco compartió en el post el documento donde el régimen castrista plantea sus supuestos argumentos para no otorgar un permiso a la movilización convocada por el colectivo Archipiélago.
El régimen cubano dice que no “reconoce legitimidad en las razones” para la marcha del 15 de noviembre organizada por @ArchipielagoCu.
Protestar es un derecho que no puede estar sujeto a los caprichos de un gobierno. pic.twitter.com/dybmtEpqDm
— José Miguel Vivanco (@VivancoJM) October 12, 2021
El gobierno comunista en vez de permitir el cumplimiento del artículo 56 de la Constitución cubana, que otorga la libertad de manifestación, asociación y reunión con fines lícitos y pacíficos, se apegó al trillado discurso que vincula a Estados Unidos con cualquier acto de la disidencia en la Isla.
En la carta dirigida al dramaturgo Yunior García Aguilera, principal promotor de la marcha, se menciona que esta actividad ha recibido el apoyo público de legisladores estadounidenses, operadores políticos y medios de comunicación “que alientan acciones contra el pueblo cubano, intentan desestabilizar el país e instan a la intervención militar”.
Sin evidencias, el régimen castrista plantea que la movilización tiene vínculos con organizaciones subversivas o agencias financiadas por EEUU.
Este posicionamiento del gobierno cubano es el segundo intento por evitar la realización de la protesta, que en todo momento ha sido promovida como un acto pacífico y legítimo para los cubanos.
El primer intento para evitarla fue con un plan para militarizar el país los días 18 y 19 de noviembre a través del Ejercicio Moncada, que concluiría con el Día Nacional de la Defensa el 20 de noviembre, fecha en que estaba programada la manifestación.
Para evitar una confrontación, los organizadores adelantaron el evento para el día 15 de noviembre, día en el que se abrirán las fronteras del país tras varios meses cerradas por la pandemia del COVID-19.
La realización de la “Marcha Cívica por el Cambio” ha sido notificada en los municipios de La Habana Vieja, Camagüey, Nuevitas, Consolación del Sur, Las Tunas, Cienfuegos, Guantánamo, Pinar del Río y Santa Clara.
En la protesta se espera la participación de miles de cubanos, quienes pedirán un alto a la violencia que ejerce el castrismo para seguir en el poder, el respeto a los derechos humanos, la libertad inmediata de los convictos de conciencia y una solución democrática a las diferencias políticas en la Mayor de las Antillas.
