Líder demócrata del Senado exige la expulsión inmediata de Trump

El líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, está exigiendo al Gabinete del presidente Donald Trump que lo expulse luego de los hechos violentos ocurridos el día de ayer en el Capitolio de Estados Unidos.

Según la agencia AP, Schumer declaró que la intrusión al Capitolio fue “una insurrección en contra de los Estados Unidos incitada por el presidente”, al tiempo que declaró que el presidente no debería permanecer en su oficina ni un día más.

El líder demócrata del Senado indicó que el vicepresidente Mike Pence y el Gabinete deberían invocar la 25ª enmienda y expulsar inmediatamente a Donald Trump de la Oficina Oval.

“Si el vicepresidente y el Gabinete se rehúsan a imponerse, el Congreso deberá reunirse para procesar al presidente”, añadió.

Por su parte, el antiguo Fiscal General de Estados Unidos, William Barr, indicó que la conducta del presidente Trump ante la violenta manifestación de sus seguidores en el Capitolio fue una “traición hacia la oficina y aquellos que lo apoyaron”.

En una declaración hecha a AP, Barr declaró que “organizar una muchedumbre para presionar al Congreso era algo imperdonable”.

Intrusión en el Capitolio

Seguidores de Trump irrumpieron en el Capitolio de Estados Unidos el miércoles en horas de la tarde, luego de que el Congreso certificara la victoria electoral del nuevo presidente Joe Biden.

La acción de los manifestantes y su elevado número obligaron a los agentes de seguridad estacionados en la sede a retroceder lo que permitió la entrada de la muchedumbre al edificio.

Los miembros del Congreso, los cuales fueron evacuados durante lo ocurrido, regresaron más tarde cuando los manifestantes del Capitolio fueron desalojados por las autoridades y procedieron a confirmar nuevamente la victoria de Biden.

Consecuencias

El jefe de la Policía del Capitolio de EEUU, Steven Sund, dijo que una muchedumbre violenta ingresó al edificio portando tubos de metal, irritantes químicos y otras armas en contra de los agentes de la policía.

Sund aseguró que los manifestantes atacaron activamente a los oficiales de policía y estaban determinados a ingresar al Capitolio causando gran daño.

Durante el incidente, un agente de la policía disparó en contra de una de los manifestantes, la cual fue identificada como Ashli Babbitt, quien fue trasladada al hospital pero fue declarada muerta más tarde ese día.

El jefe de la policía del Capitolio no identificó al oficial que disparó en contra de Babbitt, pero aseguró que fue colocado en licencia administrativa mientras se investiga el incidente.