Protesta en el consulado de la Isla en Washington para exigir libertad de Roberto Quiñones

Por segunda ocasión, Roberto Quiñones, hijo del periodista detenido en Cuba, Roberto Quiñones Haces, acudió al consulado de la Isla en Washington para exigir un alto a las injusticias que el gobierno aplica en contra de su padre.

“Roberto representa al pueblo cubano secuestrado, el régimen gánster en Cuba no nos representa”, dice uno de los carteles cargados por el pastor Mario Félix Lleonart, quien, junto con su esposa Yoaxis Marcheco, estaba acompañando a Roberto hijo.

Debido a la manifestación, la sede diplomática cerró por completo sus puertas y evitó la entrada a dos mujeres que iban a solicitar su pasaporte.

Los manifestantes en varias ocasiones gritaron ¡Abajo Díaz-Canel! y la frase ¡Viva Cuba libre!, además de reiterar que la protesta es también por todos los presos políticos y la falta de respeto hacia los derechos humanos en la Isla.

La primera manifestación de Roberto fue días después de que le dictaron a su padre una sentencia de un año de privación de libertad por supuestamente cometer actos de “desobediencia y resistencia”.

Dichos cargos son porque Quiñones Haces, quien también es abogado, intentó dar cobertura al juicio de una pareja de pastores que fue encarcelada por educar a sus hijos en casa en vez de llevarlos a las escuelas donde se imparte el adoctrinamiento comunista.

Como no se presentó voluntariamente a la cárcel de Guantánamo, policías cubanos fueron hasta su casa para detenerlo durante la tarde del pasado 11 de septiembre.

A través de reportes de medios independientes y declaraciones de su hijo, se sabe que el periodista también vive una fuerte represión dentro de la prisión donde sus visitas son limitadas o interrumpidas sin previo aviso.

Las autoridades carcelarias igual lo amenazaron con una extensión de su condena o medidas disciplinarias si continúa escribiendo artículos dentro de la prisión.

El gobierno de Estados Unidos ha dado seguimiento a las arbitrariedades contra el periodista y emitió un comunicado para expresar una condena al proceso penal por la falta de la aplicación de normas legales y la negación de un abogado.

El caso de Quiñones Haces se suma a los que actualmente se han denunciado en la Isla por atentar contra la libertad de expresión y reprimir el periodismo independiente que constata las ineficiencias del sistema comunista.

Ayer el Diario de Cuba informó que su periodista Waldo Fernández Cuenca está amenazado de cárcel si continúa con la labor de comunicar, al igual que Nelson Álvarez de ADN Cuba, a quien un par de agentes de la Seguridad del Estado le pidieron que reflexione acerca de la publicación de sus artículos y videos.