Ariel Ruiz Urquiola en huelga de hambre frente al Consejo de Derechos Humanos de la ONU

El científico cubano Ariel Ruiz Urquiola (Foto: Léo Juvier – Facebook)

El científico cubano Ariel Ruiz Urquiola se declaró este lunes en huelga de hambre y sed frente a la sede del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU) en Ginebra, Suiza.

Con esta protesta, el activista exige ser escuchado por el pleno de la ONU y busca denunciar los crímenes de lesa humanidad cometidos por el Gobierno comunista contra su persona y familia.

Léo Juvier-Hendrickx dio a conocer la noticia, señalando que entre los crímenes del sistema totalitario cubano se encuentra la inoculación del virus de VIH y la tortura médica al que ha sido sometida su hermana Omara Ruiz Urquiola.

A finales del año pasado, el científico denunció que las autoridades de la Isla ordenaron que se le infecte con el VIH cuando estaba internado en el hospital Abel Santamaría, a donde fue llevado tras iniciar una huelga de hambre en el prisión provincial Kilo 5.

En febrero pasado, Omara denunció que el gobierno le negó atención en el Instituto Nacional de Oncología y Radiobiología en La Habana, pese a que padece cáncer de mama y el tratamiento anterior se lo aplicaron de manera incorrecta.

La activista también fue expulsada de manera arbitraria del Instituto Superior de Diseño (ISDI) y además se negaron sus aportes académicos, así como la dedicación en la formación de alumnos.

“Con justificaciones supuestamente administrativas y con mentiras, omisiones de mi trabajo docente e informaciones tergiversadas me informaron de mi despido”, declaró la profesora en una entrevista.

Envenenamiento de animales en la finca de los Urquiola

Hace unos días, Ariel Ruiz Urquiola denunció que agentes de la Seguridad del Estado envenenaron a un rebaño saludable de carneros de la raza pelibuey y solo pudo sobrevivir un ejemplar.

Además, delincuentes protegidos por la policía política metieron a la finca cerdos para que dañen los plantíos de plátano y solo unos 30 árboles sobrevivieron a esta invasión.

“El desgobierno cubano a través de su brazo negro, la policía política, mandó a envenenar mientras dormían en su establo”, denunció el biólogo asegurando que su familia sigue en pie ante la fuerza destructora del gobierno cubano.

El científico logró viajar a Europa en febrero para recibir tratamiento por el VIH en el hospital Cantón de Lucerna, ubicado en Suiza.

Antes de salir de Cuba, agentes en el aeropuerto le decomisaron muestras de sangre de un animal que iba a utilizar para confirmar su muerte por envenenamiento.