NOTICIAS DE CUBA
Crisis alimentaria obliga a más de 59 mil cubanos a depender del SAF
Funcionarios castristas reconocieron las graves deficiencias en la elaboración de los alimentos
La crisis alimentaria que atraviesa Cuba, unida a la inflación galopante, sobre todo en productos agropecuarios, obliga a que más de 59 mil cubanos dependan del llamado Sistema de Atención a la Familia (SAF) para poder ingerir al menos un plato de comida al día, según dio a conocer un reportaje de la televisión oficialista.
De acuerdo con el primer ministro, Manuel Marrero, el SAF es “un programa muy humano de la Revolución”, que en la actualidad toma una relevancia mayor dadas las condiciones de vulnerabilidad de una mayor cantidad de cubanos que tras el “ordenamiento monetario” han visto disminuir sus posibilidades de ingresos. De hecho, después de enero de 2021, el SAF aumentó los precios a los que vende la comida subsidiada, y muchos pensionados se vieron obligados a darse baja del programa, pues no podían pagar esa suma diaria para poder comer.
Betsy Díaz, ministra del Comercio Interior (Mincin) que atiende el SAF, reconoció que hay dificultades en la elaboración de las comidas, ya que la industria alimentaria no cumple con las entregas planificadas de los insumos. Asimismo, refirió el déficit de producciones locales y la falta de atención y exigencia por parte de las autoridades gubernamentales para que el programa funcione mejor.
Actualmente, resulta difícil garantizar una dieta balanceada y estabilidad en los suministros. No obstante, la ministra prometió buscar alternativas para resolver las problemáticas. Explicó que “existen un conjunto de propuestas relacionadas con nuevos criterios de inclusión de las personas en situación de vulnerabilidad social que serán favorecidas, las fuentes de financiamiento para asegurar equipamiento y mobiliario, así como el esquema de abastecimiento al programa”.
El jefe de Gobierno cubano culpó a las autoridades de base, separándose a él y a la cúpula gobernante de todas las responsabilidades. En ese sentido, comentó que es “preocupante que existan gobiernos que no estén previendo nada, conociendo los problemas acumulados que hay”. Marrero Cruz dijo que el próximo año tiene que ser de transformación, con soluciones alternativas, “buscando locales para adaptarlos a estas circunstancias, con materiales propios del territorio, porque sí se pueden hacer cosas y tenemos que exigir que se hagan”.
El Sistema de Atención a la Familia está integrado por unidades gastronómicas, cuya actividad básica es prestar servicios de alimentación a adultos mayores, personas con discapacidad, casos sociales y otros con insuficiencia de ingresos y carentes de familiares obligados en condiciones de prestar ayuda.