Díaz-Canel se queja de que “censuran” los logros médicos de Cuba contra el COVID-19

Díaz-Canel se queja de que “censuran” los presuntos logros médicos de Cuba contra el COVID-19. (Foto de referencia: Presidencia Cuba-Facebook)

El designado presidente cubano Miguel Díaz Canel se mostró indignado de que Cuba no fue incluida en el ranking internacional de los países que mejor combatieron la pandemia de COVID-19.

Díaz-Canel ignoró los brotes activos en las provincias de Santa Clara, Matanzas y La Habana, únicos que se han dado a conocer de manera oficial, y las dudas sobre la fidelidad de sus cifras y se mostró ofendido con la prensa extranjera.

A través de su cuenta de Twitter, el dirigente cubano preguntó las razonas por las que medios de prensa internacional abordan a los países de la región que mejor han respondido ante la COVID-19, sin incluir a la Isla comunista.

“¿Es censura, olvido o perversa intención de no reconocernos?”, se preguntó Díaz-Canel en su mensaje.

Cuba, en la defensa de la vida. Medios de prensa internacionales hablan de los países de la región con mejor respuesta a la #COVID19 y no mencionan a #Cuba. Es censura, olvido o perversa intención de no reconocernos? #CubaSalvaVidas https://t.co/CvzjqTHzES Via @Granma_Digital

— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) May 29, 2020

Lo cierto es que desde el inicio de la pandemia ha habido mucha desconfianza respecto a las cifras otorgadas por el régimen cubano y sobre su manejo de la situación, algo que se ha expuesto en medios internacionales varias veces.

Irregularidades en el manejo del COVID-19 en Cuba

Desde que el COVID-19 llegó al continente en febrero pasado, el manejo de la situación por parte del gobierno de Cuba fue duramente cuestionado por sus ciudadanos y por expertos en la materia.

Cuba fue uno de los últimos países en cerrar sus fronteras a pesar de que la amenaza del coronavirus era inminente, además de haber suspendido sus actividades escolares y laborales hasta mediados de marzo.

La escasez de alimentos que azota la Isla no solo no fue resuelta por el gobierno, sino que aumentó por el aumento del racionamiento de cara a la pandemia.

La incapacidad del régimen de abastecer las tiendas manejadas por el Estado provoca diariamente colas kilométricas que duran horas y que a veces se forman desde la noche anterior, dinámica que no cambió con la pandemia y que deja expuestos a los cubanos entre la intemperie y el congestionamiento.

Por otro lado, el desabasto también de productos de higiene, tampoco resuelto por el régimen desde antes de la pandemia, deja vulnerables a los cubanos, quienes no pueden cumplir con las medidas más esenciales de prevención del contagio: lavarse las manos y desinfectar superficies.

Los habitantes de la Isla, cubanos y extranjeros que quedaron varados, padecen diariamente al no encontrar jabón ni detergente, aun en el mercado negro, y aún menos cloro, regulado por el gobierno.

A esto habría que sumarle el uso de homeopáticos para “prevenir” y tratar el coronavirus, siendo que no son medicinas, sino remedios muchas veces placebos, descalificados por la comunidad médica internacional por no existir base científica que compruebe su funcionamiento.

La propia Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido del uso de este tipo de remedios para tratar enfermedades, un riesgo aún mayor en este caso considerando la peligrosidad del COVID-19.

Por último tenemos la poca fiabilidad de las cifras proporcionadas por el régimen cubano, desestimadas por la propia universidad John Hopkins, que asegura que Cuba “disfraza” sus casos de coronavirus con otras enfermedades.

Entre los tratamientos no médicos y las deficiencias de su sistema de salud, Cuba reporta 1.983 casos positivos de COVID-19 y asegura haber curado a más del 80%, probablemente la razón por la que Díaz-Canel esperaba que estuviera en el conteo, sin embargo esas cifras son duramente cuestionadas por expertos a nivel internacional.