Estados Unidos distribuirá más pruebas caseras de detección de COVID-19

El gobierno quiere evitar una situación de riesgo por contagios de COVID-19 en diciembre. (Foto: Periódico Cubano)

Ante la proximidad de la temporada invernal y el aumento esperado de casos de COVID-19, el gobierno de Estados Unidos ha lanzado una iniciativa para ofrecer pruebas caseras gratuitas destinadas a detectar este coronavirus.

Como parte del pan, los estadounidenses pueden solicitar un paquete de hasta ocho dispositivos en el sitio web COVIDtests.gov. Este esfuerzo se suma a las medidas preventivas adoptadas por la administración de Joe Biden para controlar la propagación de la enfermedad a fin de año.

La entrega gratuita de estas pruebas es realizada por el Servicio Postal de EEUU, para garantizar un acceso rápido y sin costo adicional para los ciudadanos. La decisión llega en un momento en el que el país también enfrenta un incremento en los casos de influenza y virus respiratorio sincitial.

Aunque las hospitalizaciones por COVID-19 han mostrado una tendencia estable en las últimas semanas, la amenaza sigue presente y por ello las autoridades quieren evitar una crisis de ingresos como la vivida cuando no se habían producido las vacunas contra esta enfermedad.

La inmunidad proporcionada por los fármacos ha jugado un papel crucial en mantener los casos a un nivel manejable. Es importante tener en cuenta que más de un millón de personas han fallecido en el país a causa de esta infección. Cabe recordar que el contagio de COVID-19 fue la cuarta causa de muerte en EEUU durante el año pasado.

Este invierno marca el primero desde el inicio de la pandemia en el que las aseguradoras no están obligadas a cubrir el costo de las mencionadas pruebas. El precio promedio de estos dispositivos es ahora de 11 dólares. La distribución gratuita busca mitigar esta carga financiera para los ciudadanos de la nación norteamericana.

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) ha aprobado recientemente vacunas actualizadas contra la enfermedad, enfocadas en combatir variantes como XBB.1.5, un descendiente de Ómicron. Estas reemplazan a las versiones anteriores y se recomiendan para todas las personas mayores de seis meses.

El gobierno de EEUU ha invertido decenas de miles de millones de dólares en el desarrollo de pruebas, vacunas y tratamientos contra la COVID-19 desde el inicio de la pandemia. Estos esfuerzos reflejan el compromiso continuo con la salud y seguridad de la población.

Ante el riesgo de contagio en esta época del año, es necesario tomar medidas preventivas, aunque no sean obligatorias, como el uso de mascarillas, constante lavado de manos y tomar precauciones en lugares concurridos.