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Reconocen atrasos en la bancarización del sector agropecuario en Cuba
La prensa oficialista aboga por más incentivos para acostumbrar a las personas a entrar al comercio digital
Un artículo publicado en el diario oficialista Granma reconoce grandes atrasos en la implantación de la estrategia de bancarización, ordenada en la Resolución 111 de 2023 del Banco Central de Cuba (BCC), en el sector agropecuario, particularmente en los mercados de oferta y demanda donde intervienen actores privados en el proceso de comercialización.
Por ejemplo, el texto refiere que Mercasa, una Mipyme ubicada en Las Tunas especializada en la venta de productos agropecuarios, se queja de los problemas de la plataforma EnZona cuando quiso insertar su negocio en canales de pagos digitales.
Argel Frank Fundora Acosta, socio de la empresa, menciona obstáculos como la preferencia de sus proveedores por el efectivo y la resistencia de los clientes al cambio. Mientras tanto, Jorge Luis Aleaga Fonseca, representante de la Delegación Provincial de la Agricultura, concuerda en que la digitalización en este ámbito aún tiene un largo camino por recorrer.
Por su parte, en Granma los resultados son parecidos. El jefe de mercado ‘Jesús Menéndez’ en la ciudad de Bayamo, Ángel Luis Ramírez Quiala, explica que no están disponibles canales de pago electrónicos a casi dos meses de haberse orientado la resolución del BCC. “Aunque intentamos favorecer los pagos electrónicos, la insistencia por el efectivo de los campesinos y proveedores entorpece la transición”.
En el caso de Santiago de Cuba, una provincia altamente poblada que cuenta con 46 agromercados, solo en cinco de ellos ya se pueden hacer pagos con QR. Zaida Savigne González, del mercado central, destaca que muchas veces estos sistemas no se emplean correctamente, fortaleciendo la hegemonía del efectivo. Los elevados costos de instalación y las costumbres arraigadas en la clientela también actúan como barreras.
La digitalización y bancarización de las transacciones de compra y venta facilitan el control fiscal y la observación de las transacciones. Estos procesos digitales dejan un rastro que permiten al régimen castrista el seguimiento de todo el proceso contable de tu negocio. Por experiencias pasadas se sabe que el gobierno puede decidir cerrar un emprendimiento sin respetar el derecho a la propiedad privada, simplemente alegando que el dueño tiene “enriquecimiento ilícito”.
Por su lado, la adopción masiva de estos sistemas presenta desafíos, como preocupaciones sobre la privacidad y seguridad de los datos recopilados. No todos tienen fácil acceso a servicios bancarios o digitales, y la digitalización conlleva una dependencia tecnológica que puede ser problemática en caso de fallos.