Sube el precio de los alimentos en Cuba: hotel vende combo en 5.000 CUP

El hotel Deauville está ubicado en Galiano, entre Malecón y San Lázaro, en La Habana. (Foto: Hotel Deauville-Facebook)

La escasez de alimentos en Cuba está cada día peor. Los precios se disparan sin control y el propio gobierno castrista toma medidas contrarias para hacer frente a la inflación. En este contexto, el medio independiente 14ymedio reporta desde La Habana que el hotel Deauville vende combos de comida en 5.000 CUP.

A falta de visitantes extranjeros, el establecimiento turístico quiere generar ganancias a costa del pueblo cubano. Dos paquetes de galletas dulces, dos botellas de vino, un kilogramo de queso, uno de jamón, un paquete de café, una tina de helado y una caja de cervezas, son los elementos del combo, para el cual hay una cola en la calle Galiano, entre Malecón y San Lázaro, en La Habana.

Los cubanos no pueden escoger cuál alimento comprar, pues la modalidad de combo fue creada para vender más y, por supuesto, a mayor precio.

Desde que se implantó el mal llamado ordenamiento monetario el pasado 1ro de enero de 2021, también entró en vigor una reforma salarial que aumentó el pago a los trabajadores, pero la inflación galopante ha rebajado todas las expectativas del pueblo cubano.

Un salario mínimo quedó situado en 2.100, por lo cual no representa ni la mitad del combo de alimentos vendido por la instalación hotelera con categoría tres estrellas de la cadena Gran Caribe.

Los productos que se comercializan en el mercado negro también tienen precios alarmantes. En un rápido vistazo por las redes sociales y sitios de anuncios y clasificados, se pueden encontrar ejemplos que permiten ilustrar que la situación con la alimentación dentro de Cuba es caótica.

Por ejemplo, una libra de malanga está cotizada en 80 CUP, una bolsa de leche en polvo está cercana a los 1.000 pesos cubanos y una bolsa de panes de solo 10 unidades puede llegar a costar 50 CUP.

Ante ese escenario, el gobierno cubano ordenó un cobro de impuesto (del 10%) adicional sobre las ventas que generen los comercializadores estatales y privados de los productos del agro. Dicho impuesto encarecerá el precio de los productos, pues los vendedores -como es lógico- trasladarán el valor hacia el producto final.

Sobre esto comentó el economista cubano Mauricio de Miranda. El catedrático radicado en Cali, Colombia, desde hace años se pregunta si la medida fiscal justo en este momento es un ejemplo de política económica de carácter socialista.

“Sí, sabemos que el país también sufre una crisis fiscal, determinada por un incremento notable del déficit y de su proporción respecto al PIB. Sin embargo, ¿el gobierno pretende solucionar la crisis fiscal gravando la venta de productos de primera necesidad? ¿Sigue insistiendo el gobierno cubano que no es responsable de la estampida inflacionaria que sufre la población cubana y que afecta en mayor medida a la mayor parte de la población, la cual destina la inmensa mayoría de sus ingresos en consumir alimentos?”, cuestiona.