Venden prótesis dental de un muerto en Cuba

Internautas aseguraron que se trata de una “broma”. (Captura de pantalla: Grupo Compra y venta Bejucal – Facebook)

La prótesis dental de un presunto fallecido fue puesta en venta en Cuba, según ha trascendido en redes sociales. La imagen de “los dientes” del difunto fue compartida en el grupo de Facebook Compra y Venta en Bejucal, y ha sido replicada por el sitio digital Cubanos por el Mundo, aunque no se especifica si esta insólita propuesta comercial es reciente, o si es una publicación de hace algún tiempo.  

“Cuando crees que la miseria en Cuba ha tocado fondo, espera y prepárate para ver algo peor.
¡El colmo! Cubano vende prótesis dental de una persona que falleció. La situación demuestra la pobreza extrema que hay en la Isla, tanto que los antillanos han perdido la vergüenza de vender un accesorio de uso personal”, se puede leer en el post en Instagram del medio de prensa independiente. 

Entre los comentarios dejados por los internautas, un usuario identificado como Joséarango19 aseguró que no se trata de ninguna broma y que la venta fue efectuada en el municipio Surgidero de Batabanó, en la provincia Mayabeque. 

“El dentista la modificó y pagó 180.000 pesos cubanos. Es vecino de una amiga, ¿te imaginas? O sea, el muerto sigue masticando”, refirió.

Sin embargo, otros internautas aseguran que se trata de una broma, lo cual también ha sido criticado por muchos porque consideraron una falta de respeto divertirse con algo tan delicado como los despojos de un fallecido. 

Una cubana que responde al nombre de Yailin-cubanita compartió en el post de Instagram: “Soy de donde salió esa publicación y todo fue en broma”.

Cierto o no, la verdad es que la situación del país ha hecho que los cubanos se sientan desesperados ante la escasez de alimentos, medicinas y productos de primera necesidad, provocando que “vivir del invento” se haya convertido en el deporte nacional. 

En varias provincias se han reportado asaltos a tumbas en los cementerios, no solo para emplear los huesos de los difuntos en rituales de las religiones yorubas, sino también en busca de alguna pieza de valor, incluso ropa y zapatos, que puedan ser comercializadas por ladrones sin escrúpulos.