Dictadura cubana cometió en julio al menos 790 acciones represivas

Uno de los principales objetivos de las acciones represivas son los familiares de los prisioneros políticos y de conciencia. (Foto: Periódico Cubano)

El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) denunció este jueves que el régimen de Cuba cometió en el mes de julio al menos 790 acciones represivas, de las cuales 136 fueron detenciones arbitrarias y 654, otros abusos.

Los observadores del OCDH en la Isla registraron 353 sitios de viviendas y 159 casos de hostigamiento, además de amenazas, citaciones policiales, multas, agresiones, impedimentos de viaje al extranjero, exilio forzado, entre otras acciones represivas contra la población civil.

La arremetida coincidió con el primer aniversario de las históricas protestas del 11 de julio de 2021 y con las generalizadas muestras de descontento popular en todo el país.

En ese sentido, el OCDH advierte del alarmante deterioro de la situación económica y social en Cuba, de la mano de condiciones epidemiológicas y sanitarias graves, carencia de alimentos y medicamentos, apagones masivos y el incremento de la represión contra activistas y ciudadanos que protestan.

“Apoyamos el derecho del pueblo cubano a protestar y expresarse pacíficamente en las calles. El gobierno de Cuba tiene la obligación de respetar ese derecho y no tomar ninguna acción para coartar o reprimir a los manifestantes. Una vez más, pedimos a la comunidad internacional que presione al régimen de Cuba para que respete esos derechos y escuche las demandas de la gente”, afirmó el organismo, con sede en Madrid.

Hace apenas unas dos semanas, la organización ubicada en la capital española, denunció el alarmante deterioro de la situación económica y social en Cuba, de la mano de condiciones epidemiológicas y sanitarias graves, carencia de alimentos y medicamentos, apagones masivos y el incremento de la represión contra activistas y ciudadanos que protestan.

A pesar de los cientos de denuncias que aparecen en las redes sociales en cuanto a la situación epidemiológica, la dictadura se encarga de dar una visión al mundo de mejoría, promoviendo la producción de antibióticos inyectables como el Rocephin. 

Desde antes del inicio de la pandemia, en las farmacias de la Mayor de las Antillas escaseaban varios medicamentos, pero en los últimos tiempos la situación se ha arreciado. Una dosis de Rocephin, que alega el régimen producirá, llegó a costar entre 5.000 y 15.000 pesos en el mercado negro, a donde se veían obligadas a llegar las familias, para salvar a su enfermo con COVID-19.

El tema del dengue está cada vez peor, los rebrotes en toda la Isla ha traído como consecuencia que los hospitales se encuentren desbordados, y los niños estén siendo los más afectados. Además de carecer de fármacos para darle frente a los pacientes que pueden presentar síntomas graves, tampoco hay un interés gubernamental por eliminar los focos de mosquitos, que proliferan en todas las ciudades cubanas.

Pero el pueblo, aunque la arremetida ha sido fuerte, ha buscado la manera de manifestarse a través de las redes sociales, y con los largos apagones, en muchas localidades de la geografía antillana, los ciudadanos han tomado las calles. El Observatorio Cubano de Conflictos (OCC), contabilizó en el mes de julio unas 263 manifestaciones por motivos políticos, económicos y sociales.